(Ilustración: Jhafet Pianchachi / GEC)
(Ilustración: Jhafet Pianchachi / GEC)
/ Jhafet Pianchachi
Jonathan Castro

El camino hacia las abre campo para la participación de exautoridades regionales en las listas. Juan Sotomayor, exalcalde provincial del Callao, ha sido uno de los primeros de este grupo en anunciar que postulará.

¿Pero qué resultado han obtenido las autoridades provinciales y regionales que intentaron dar el salto a una representación nacional? El Comercio hizo una revisión histórica de la participación de los titulares de los 25 gobiernos regionales y de las 25 alcaldías de las capitales departamentales en las elecciones parlamentarias entre el 2006 y el 2016.

Los primeros gobernadores regionales –antes llamados presidentes regionales– fueron elegidos en el 2002. Por ello, para este análisis se ha considerado solo a los gobernadores y alcaldes que fueron elegidos o asumieron la conducción de su entidad por la fuerza de las circunstancias –vacancias, renuncias, arrestos o muertes de los titulares– a partir de ese año.

La participación de exgobernadores en elecciones congresales no ha sido muy alta: de 103 personas que ocuparon esos cargos en las 25 regiones, solo el 25% se animó a postular al Congreso, y el 4,9% resultó elegido. Los únicos que conforman este grupo son Yehude Simon, César Villanueva, Rogelio Canches, Eloy Narváez y Víctor Albrecht. Los dos últimos fueron elegidos vicegobernadores, pero tuvieron en cierto punto que asumir el mando de sus regiones.

Por el lado de los exalcaldes, la participación ha sido más baja: de 104 personas que ocuparon los asientos edilicios en 25 comunas, solo el 14,4% decidió postular y el 3,8% salió elegido. Juan Carlos del Águila, Tito Valle, Mariano Portugal y Gloria Montenegro integran este grupo. La última asumió sus funciones cuando César Acuña dejó el municipio para postular a la región.

Para Jorge Aragón, investigador del IEP, la participación de exautoridades es positiva, pues tienen experiencia política de gobierno, excepto por aquellos que en realidad buscan inmunidad. “Por eso, el costo de la no reelección me parece demasiado alto”, afirma.

Aragón señala que esta situación también muestra lo difícil que es pasar del ámbito regional al nacional y, por ende, las autoridades locales terminan pesando poco en la agenda. A eso se suma que los que resultan elegidos tienen dificultades por mantener un vínculo fuerte con su región.

De otro lado, en cada elección ha crecido la cantidad de exautoridades subnacionales que han sido incorporadas en las listas de candidatos. Una de las razones podría ser que cada vez crece más el bolsón de dónde elegir.

Otra explicación sería que los partidos nacionales ven cada vez más a políticos con alguna notoriedad en sus regiones para convocarlos. De las 40 exautoridades incluidas en este análisis y que postularon al Congreso, la mitad no están afiliados ni fueron elegidos previamente por los partidos con los que candidatearon.

El partido que más jales hizo fue Peruanos por el Kambio (ahora Contigo). Las cuatro exautoridades –tres de ellos exgobernadores– que postularon por su lista al Congreso no tenían relación con ellos, ni con Alianza por el Gran Cambio, la plataforma con la que Pedro Pablo Kuczynski postuló a la presidencia en el 2011. A esa lista se debe sumar el actual mandatario y exgobernador de Moquegua, Martín Vizcarra, quien integraba la plancha presidencial.

La Alianza Popular –confluencia del Apra, el Partido Popular Cristiano y Vamos Perú en el 2016– también incorporó a un exgobernador entre sus candidatos al Congreso y a la segunda vicepresidencia: David Salazar Morote, otrora cabeza de la región Apurímac.

Pero el Apra ha sido uno de los partidos que más ha postulado a exautoridades que son militantes o que fueron elegidos por la estrella: fueron ocho de los 12 que se han postulado en solitario o alianza.

—Principal interés—

El politólogo Mauricio Zavaleta señala que en realidad existen pocos incentivos para que una exautoridad local postule al Legislativo. Para él, el principal interés de los políticos regionales es alcanzar los gobiernos subnacionales, pues ahí manejan presupuesto, realizan licitaciones y pueden hacer carrera política.

Su participación en elecciones al Parlamento sirve, en muchos casos, para hacerse conocido en la región, y son pocos los políticos que buscan realmente entrar al Parlamento como un fin, y no como un camino hacia un gobierno subnacional, afirma. “Los políticos son como tiburones que tienen que estar nadando constantemente. ¿Qué es lo que les permite seguir nadando? Las elecciones. Ellos tienen que estar postulando constantemente porque no hay un sostén mínimo para tener trayectorias de mediano plazo”, explica.

En esa lógica, señala que no sería extraño que aquellos candidatos que perdieron en las elecciones regionales del 2018 busquen participar en la .

(Elaboración: Antonio Tarazona)
(Elaboración: Antonio Tarazona)
/ Antonio Tarazona