Keiko Fujimori no cambiará su estrategia de campaña

Cuando a mediados de enero se publicó la encuesta de El Comercio-Ipsos, a Keiko Fujimori (Fuerza Popular) no le sorprendió el resultado de la intención de voto presidencial, que la mantenía primera con 33%. 

Lo que más llamó su atención fue la reducción de su antivoto, que pasó de 40% a 34%. En ese momento, Fujimori atribuyó la disminución al proceso de renovación y apertura de su agrupación. Por ejemplo, el anuncio de que históricos del fujimorismo, como Martha Chávez, no iban a la reelección al Congreso o el reconocimiento en su plan de gobierno del diagnóstico realizado por la Comisión de la Verdad. 

Pero la figura ha cambiado. El antivoto contra Keiko Fujimori creció en la encuesta de febrero de El Comercio-Ipsos: pasó de 34% a 40%. 

El aumento coincide con el crecimiento de Julio Guzmán (Todos por el Perú), escolta de Fujimori en la intención de voto, y un cambio en su estrategia: en medio de los problemas por la inscripción de su candidatura, comenzó a mostrarse como la opción contra el fujimorismo. Esta posición, a su vez, la tomó luego de que las encuestas mostraran un empate técnico entre Fujimori y él en una virtual segunda vuelta.

Para el politólogo Eduardo Dargent, “en este momento Keiko Fujimori está cosechando un poco del antifujimorismo, que es muy fuerte en la sociedad y que lleva a que un candidato [Guzmán] que tal vez no sea el favorito de mucha gente, pero que se ve como que puede darle pelea a Fujimori, de pronto tenga bastante atractivo”. 

Públicamente, el fujimorismo ha restado importancia al crecimiento del antivoto. El jefe de campaña de Fuerza Popular, Pier Figari, lo atribuye a la variación de las encuestas. 

Sin embargo, dice que llama la atención el ambiente que, según él, hay en esta parte de la campaña. Afirma que le recuerda a la polarización que hubo en la segunda vuelta de los comicios del 2011: “La primera vuelta del 2011 no tenía este ingrediente. Era más de propuestas, era una primera vuelta más estándar”. 

En los últimos días, hubo algunos incidentes contra Keiko Fujimori (le tiraron una piedra y huevos en actividades). También hubo una protesta contra el fujimorismo en el aeropuerto de Arequipa, que derivó en una gresca. En un video se ve a dirigentes fujimoristas como Joaquín Ramírez y Figari agrediendo verbalmente a algunos manifestantes. 

Por lo que pudo enterarse este Diario, la protesta fue impulsada por un ex precandidato al Congreso del partido. Misma táctica Pese a su hipótesis, Figari dijo que su agrupación seguirá con su estrategia de constantes viajes al interior del país (sobre todo a zonas rurales), los que alternarán con actividades en Lima. “La campaña no se puede centrar en los fallos del JNE. La campaña se hace en la calle, en las provincias”, indicó. 

El analista político Carlos Tapia dijo que, hasta el momento, la estrategia de Fujimori ha tenido un efecto positivo. “No es poca cosa que se mantenga como puntera absoluta por encima del 30% en la intención de voto. De seguir así, además lograría más de 50 congresistas”. 

Tapia también resaltó que la táctica de Keiko Fujimori, de no pelearse con otros candidatos, le está dando resultados. 

Hasta ahora, el mayor enfrentamiento que ha tenido Fujimori ha sido con Nadine Heredia, quien le ha recordado la corrupción del gobierno de su padre. En el fujimorismo incluso hay la sensación de la presencia del gobierno en la campaña. La vocera de FP, Cecilia Chacón, recordó ayer que Daniel Urresti y Daniel Abugattás han sugerido que Guzmán es el candidato de Heredia. 

Para el analista político Enrique Bernales, “parece que en la campaña hay intereses que buscan que la segunda vuelta ya esté definida”.

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