En una conferencia de prensa donde estuvo acompañado del ministro de Defensa, Pedro Cateriano, y el titular de Justicia, Daniel Figallo, el jefe del Gabinete, Juan Jiménez Mayor, descartó que haya existido injerencia o presión del Gobierno a la doctora Carmen Rojjasi, ex responsable de la sala a cargo del Caso Chavín de Huántar, para que su sentencia sobre el particular no afecte el proceso contra el Estado abierto en la Corte IDH.

En el tribunal internacional, el Estado fue denunciado por no emitir un fallo en torno a presuntas ejecuciones extrajudiciales durante la operación militar, tras nueve años de proceso.

Jiménez puntualizó que la sesión de donde se desprendieron los polémicos audios difundidos vía YouTube, no fue clandestina ni en un hotel sino patrocinada por el entonces presidente del Poder Judicial, César San Martín. En esa línea, manifestó que la cita fue para articular la defensa del Estado ante la CIDH y no tenía el propósito de interferir en la decisión que el la jueza Rojjasi iba a tomar en torno a las presuntas ejecuciones extrajudiciales tras la liberación de rehenes en abril de 1997.

“El ministro de Justicia tiene competencia de coordinar con el Poder Judicial para velar por una pronta y eficaz administración de justicia, según ley de defensa del Estado. Quien habla lo que hizo fue utilizar esas atribuciones legales para la defensa del Estado ante la CIDH”, remarcó Jiménez.

Detalló que entre otras cosas, debía definirse que la actuación de los comandos Chavín de Huántar fue “impecable y dentro del marco de la ley”. “Estamos indignados por la existencia de esta subcultura del ‘chuponeo’, de la interceptación, de la violación de comunicaciones. Esta manipulación grosera que se ha hecho de la conversación la vamos a denunciar, es muy fácil hacer denuncias tirando la piedra, escondiéndose, no dar la cara y poner frases, sacar palabras y afectar los derechos de quienes están en las reuniones”, subrayó.

“YO SOLICITÉ REUNIÓN CON EL PODER JUDICIAL” A su turno, el ex agente peruano ante la Corte IDH y actual ministro de Defensa, Pedro Cateriano, resaltó que el propósito del encuentro fue la defensa de los comandos Chavín de Huántar “diseñando una estrategia para desbaratar los argumentos con que se pretendía acusarlos”.

“La intención ha sido vender la idea de que el PJ no trabaja de manera independiente cuando es de dominio público que este Gobierno es respetuoso de las resoluciones judiciales. Basta de emplear audios manipulados, editados con fines políticos y con frases fuera de contexto para destruir al adversario político”, concluyó.