DIANA SEMINARIO MARÓN

¿Se acabó el sueño brasileño? Hay una serie de factores que nos hacen ver que el sueño se ha terminado. El primero es que Brasil tiene un crecimiento de 0,9% anual y en el índice de crecimiento mundial está en el puesto 164 de 200 países. El Perú crece 6,3% al año y está en el puesto 42. Brasil es la sexta potencia económica mundial, es enormemente rico en términos de población, es una potencia con una clase media de 50 millones de personas. Y esta clase media, dirigida por los estudiantes y acompañada por sectores populares, es la que ha hecho una protesta gigantesca contra el fracaso del sistema económico, porque es una economía que no crece, con inflación y a la que se suma una corrupción visible.

El diario “O Globo” publicó una encuesta en la que el 56% dice que protesta por estar insatisfecho con todo lo que ofrece el Estado y el 20% protesta por la corrupción. La razón principal es que el llamado modelo brasileño –que ha sido una fantasía ideológica de exportación– no era real en el país de origen.

¿Por qué? Por un asistencialismo en el que se le daba una suma de dinero a un grupo de personas y en el fondo no había ningún logro en infraestructura, servicios públicos, transporte, educación, todo lo que la clase media y el pueblo necesita. La clase media requiere servicios públicos operativos y no los tiene.

¿Un asistencialismo sin crecimiento va a generar de todas maneras esta situación? El modelo brasileño ha terminado siendo asistencialismo sin desarrollo y con inflación.

Más corrupción Una corrupción que, según la prensa brasileña, se percibe que está en crecimiento, porque el próximo año será el Mundial de Fútbol y en el 2016 los Juegos Olímpicos. Según parece, los gastos para construir las instalaciones son extravagantes, lo que ha llamado la atención de la opinión pública, cuando el país pasa por un muy mal momento económico, con un empobrecimiento real por la inflación.

¿Luego de diez años de gobierno del Partido de los Trabajadores, cuál cree que ha sido el detonante de esta situación? Lo que gatilló la crisis fue el aumento del pasaje del transporte público, que en Río de Janeiro y Sao Paulo se incrementó en 20 centavos. Esa fue la chispa que encendió la protesta, pero el malestar comenzó en el 2011. En la crisis del 2008, Brasil empezó a levantar cabeza hasta llegar a 2,5% de crecimiento anual en el 2011, pero desde ahí ese crecimiento se vino en picada hasta llegar al 0,9%. A la crisis económica se suma una verdadera crisis moral por la corrupción que afecta al Estado en sus niveles más altos, con sueldos de cerca de 10 mil dólares para los funcionarios públicos importantes.

Mencionó que el modelo brasileño ha sido de exportación. Durante la campaña electoral del 2011, cuando se planteó la hoja de ruta, se dijo que Humala sería ‘el Lula peruano’, porque tomaría el modelo brasileño, y vemos cómo termina El modelo brasileño ha terminado como acaban todos los regímenes socialistas populistas. Así terminó el gobierno de Velasco, el de Juan Domingo Perón y así van a terminar Cristina Kirchner y Nicolás Maduro , porque todos ellos han adoptado modelos que ya fueron ensayados en el pasado y que se ha probado que fracasan. Sin embargo, la tentación del populismo para usufructuar el poder hace que recurrentemente saquen estas falacias de debajo de la manga y les pongan etiquetas nuevas. Durante la campaña electoral, quienes apoyaron la gran transformación se llenaban la boca con el modelo brasileño y este no es otra cosa que corrupción con inflación y decrecimiento económico.

Brasil es la sexta economía del mundo, forma parte de los Brics (Brasil, India, Rusia, China y Sudáfrica), muchos quieren hacer negocios con Brasil. El Perú tiene una alianza estratégica, por lo tanto es un país muy atractivo. Es atractivo por su dimensión. Forma parte de los Brics porque tiene un territorio gigantesco y una población de 205 millones de habitantes, la China porque tiene más de 1.200, Rusia porque es el país más grande del mundo. Pero no puede decirse que los Brics representan naciones con sistemas económicos dinámicos que estén en la punta de la avanzada tecnológica del mundo. Son países que representan una masa crítica de potencial económico enorme, porque son muy grandes y muy proteccionistas.

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