Ayer el general Aldo Miranda fue relevado de la dirección ejecutiva de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional por haber firmado la orden inicial para que se resguarde la casa de Batallón Libres de Trujillo 209, donde supuestamente vivía el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, pero en realidad acogía a Óscar López Meneses, ex operador del fujimontesinismo.
En comunicación con IDL-Reporteros, el ex jefe de la VII Región Policial contó que la protección a la referida vivienda comenzó por una llamada del entonces director de la PNP, Raúl Salazar.
“A mí me llamó el general Raúl Salazar y me dijo que me iba a llamar el almirante José Cueto [jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas] para que se le dé seguridad a su domicilio (…) al poco rato me llamó una persona que se me presentó como el almirante Cueto y me dio la dirección de su casa para brindarle la seguridad correspondiente”, manifestó.
Miranda afirmó que una persona que se identificó como el secretario de Cueto Aservi se comunicó con él y le pasó como el supuesto jefe del Comando Conjunto de las FF.AA.
“Yo he hablado dos o tres veces con él. En una oportunidad, en una actuación, me acerqué a saludarlo. ‘Soy el general Miranda, señor almirante’… ‘¡Ah, sí, sí, qué tal…’ … ‘El servicio, ¿todo bien, señor?’… ‘sí, sí, todo bien…’. … no me reclamó ni me dijo nada… o sea, yo he tratado de hacer esto con la mayor transparencia”, refirió.
Para concluir, Miranda reiteró que él actuó en cumplimiento de una orden dada por Salazar.