La Ley del Servicio Civil fue aprobada ayer en el Congreso luego de casi dos sesiones plenarias de debate y en medio de marchas y protestas de los trabajadores estatales en Lima y ciudades del interior del país. Ellos señalan que la norma viola sus derechos de sindicalización y que permitirá una ola de despidos.
Sin embargo, la Autoridad Nacional del Servicio Civil (Servir) afirmó hoy que la iniciativa promueve la meritocracia y que los mejores empleados estén en los puestos que correspondan. “No pensamos en el Estado como beneficencia ni en reducir personal, sino cómo vamos a cumplir con los ciudadanos y hacemos una planificación en recursos humanos para dar un óptimo servicio”, dijo el presidente ejecutivo de Servir, Juan Carlos Cortés en diálogo con Radio Programas.
Pese a la polémica originada a raíz de la nueva ley, son pocos los que han explicado cómo afectará a los trabajadores. A continuación les damos los puntos claves del dictamen que recibió la luz verde del Parlamento:
PUNTO FINAL AL CAOS La autógrafa de la Ley del Servicio Civil es la reforma del Estado más importante de los últimos 30 años, porque uniformiza el sistema laboral de la administración pública.
Fusiona los regímenes laborales de la administración pública normados por los decretos legislativos 276, 728 y por el contrato administrativo de servicios (CAS). En ellos hay 502 mil trabajadores.
Ordena el sistema de remuneraciones del Estado, que tiene más de 400 conceptos de pago.
Esta norma no toca el sistema laboral de magistrados, diplomáticos, militares, policías, profesionales y asistentes de la salud, catedráticos y profesores, pues tienen su propio sistema de personal.
Están exonerados del nuevo régimen los trabajadores de las empresas públicas, así como los obreros de gobiernos regionales y locales. Tampoco están los servidores del Parlamento, BCR, Sunat, Aduanas y contraloría general.
EVALUACIONES La nueva ley del servicio civil, al tener como eje la meritocracia, establece evaluaciones permanentes de rendimiento para el personal.
Las evaluaciones serán anuales y dentro del cumplimiento de funciones del servidor. Las realizarán entidades ajenas a la entidad pública.
El trabajador conocerá las variables de sus evaluaciones.
Los que aprueben en el 10% de mayor puntaje tendrán la posibilidad de ascensos, mejores sueldos y mayor capacitación.
Los que desaprueben tres veces seguidas, saldrán de la administración pública. (El reglamento de la norma señalará mecanismos de salida o compensaciones.).
VACACIONES Y GRATIFICACIONES Un beneficio para todos los servidores del nuevo régimen son las vacaciones y aguinaldos por Fiestas Patrias y Navidad y la CTS, que serán equivalentes al pago mensual.
La nueva norma prohíbe negociar aumento de sueldos, porque habrá remuneraciones diferenciadas según rendimiento personal y porque ello depende del Presupuesto General de la República, que aprueba de modo centralizado el Ministerio de Economía y Finanzas.
El derecho de huelga se ejerce una vez agotados los mecanismos de negociación o mediación. Este derecho permite a la entidad pública la contratación temporal de personal.