Dos políticos venezolanos de oposición al gobierno de Nicolás Maduro se reunieron hoy con legisladores peruanos de diversas bancadas en busca de apoyo para restablecer la democracia en su país.

El diputado Eduardo Gómez denunció que el chavismo ha amordazado a la oposición y que se les niega a sus integrantes el uso de la palabra durante los plenos del Congreso en Venezuela. “No hay parlamento en el mundo que pueda permitirse el quitarle la palabra a los legisladores electos popularmente, lo que hace el gobierno es un golpe”, añadió.

Gómez también señaló que todas las bancadas del Congreso peruano le han expresado su apoyo y adelantó que ya cuentan con más de 400 mil firmas de legisladores del continente que piden transparencia en la auditoría de las elecciones del 14 de abril.

El aliado de Henrique Capriles también señaló que el gobierno de Maduro ha incumplido con el acuerdo adoptado por la Unasur en Lima, es decir, el recuento de los votos.

“La palabra de Maduro solamente duro el tiempo que estuvieron los presidente en el país. Ahora, lo que corresponde es iniciar el proceso de impugnación (de los comicios) y plantear una nueva elecciones”, agregó.

AGRESIÓN A DIPUTADOS Por su parte, el ex alcalde de Chaco de Caracas, Leopoldo López, denunció la agresión que sufrieron los congresistas venezolanos María Corina Machado y Julio Borja, golpeados brutalmente por los oficialistas.

“En el momento de la agresión, las cámaras de la televisora estatal, la única que tiene acceso al parlamento, miraban al techo (…) Esta golpiza es un intento de arrinconamiento e intimidación”, manifestó.

López también abogó por una nueva elección y recordó que el Perú tiene experiencia en esta clase de “válvulas de escape” para recuperar la democracia, en referencia a la caída del fujimorato a inicios del siglo XXI.

Evitó pronunciarse sobre el apoyo del presidente Ollanta Humala al régimen chavista y solo se limitó a decir que han venido a dar toda la información.

“La decisión de la Unasur ha sido irrespetada por parte del Consejo Nacional Electoral y el gobierno venezolano. No hubo auditoría minuciosa, confiable y que realmente exprese cuál fue la voluntad popular de los venezolanos el 14 de abril”, concluyó.