La vicepresidenta Marisol Espinoza afirmó hoy que está en contra de la revocación a la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, porque “creo que se le debe dar la oportunidad al funcionario de terminar su tarea y una vez concluida la puedes evaluar”.

En el noticiero “Abre los ojos”, dijo que todavía no se ha visto el resultado de la administración villaranista. Aunque aclaró que su posición es personal y dijo que la bancada de Gana Perú todavía no ha adoptado una postura.

“Aquí el Gobierno no ha tomado decisión y la bancada tampoco. Me pronuncio, personalmente, en contra de la revocación”, manifestó.

Además, la también legisladora oficiales evitó pronunciarse sobre las declaraciones que dio ayer el viceministro de Justicia, Daniel Figallo, quien dijo que esta semana se definirá si el pedido de indulto humanitario de Alberto Fujimori continúa o se archiva luego de que el ex presidente frutara la evaluación de la Junta Médica.

“NO LE HE FALLADO A MIS ABUELOS” De otro lado, Espinoza dijo que fue su abuela Digna Sánchez y los hijos de esta los que decidieron dejar de recibir Pensión 65. “Vuelvo a señalar que fue mi abuela la que decidió (dejar de recibir la pensión). Ella tiene dos viviendas de material noble que se las ha dejado a sus hijos, yo no puedo ir en contra de esa costumbre”, agregó.

Recordó que ella y su hermana cuidaron a su abuelo enfermo hasta el momento de su muerte, por lo que sostuvo que “nadie puede levantar el dedo y decir que le he fallado a mis abuelos”.

La vicepresidenta aclaró que en el caso de su abuela no hay ninguna irregularidad, porque “no puedo ni inscribir ni desafiliar a nadie” del programa Pensión 65.

Finalmente, señaló que sus tíos velan por el bienestar de su abuela y que la denuncia tuvo un trasfondo político.