El candidato señala que su campaña es austera y que la financian amigos y correligionarios. (Foto: El Comercio)
El candidato señala que su campaña es austera y que la financian amigos y correligionarios. (Foto: El Comercio)
Diego Chirinos

sostiene que el debate del domingo “quedó corto” para exponer ideas. Un día después, intenta explayarse en sus planes para Lima.

—En el debate se escucharon pocas medidas concretas. ¿Cuáles definiría como las principales de su candidatura?
Nuestro plan pone al ciudadano delante y no a las obras. Habrá obras, pero no de forma irresponsable. Hay cosas que, por más que haya buena intención, no se van a poder realizar. Tenemos un presupuesto de S/3.200 millones; no hay plata suficiente.

—Pero asumo que tiene algunas contempladas.
Es que hay inmateriales y materiales. De las inmateriales, queremos transparentar la municipalidad, convocar desde el primer día al Comité Regional de Seguridad Ciudadana. En lo material, finalizaremos 12 km faltantes del Metropolitano para que se conecte de Independencia a Carabayllo. Son 18 estaciones no construidas.

—¿Un teleférico le parece prioritario para Lima?
Seguro ninguno de los analistas que creen lo contrario vive en San Juan de Lurigancho o Independencia. Ir de un lado a otro puede tomar tres horas. Con esto se reduce a 26 minutos. Lima necesita varias intervenciones como esta. Es viable.

—Señaló que hoy la última prioridad es el peatón. ¿Cómo le dará prioridad a este?
Debemos darle más veredas, más anchas, seguridad vial para protegerlos, mejores semáforos, un mejor pintado de cruces y hacer todo un trabajo de educación vial.

—Su plan estipula la meta de tener al 2022 “una ciudad con problemas menores de tránsito vehicular, conectada y a la que es sencillo acceder”. ¿Cómo aterriza ese objetivo que resulta, por lo menos, gaseoso?
No pusimos indicadores porque hay que construir soluciones para comenzar a medir en cuánto se mejoró, por ejemplo, el tiempo de transporte de personas. Si al 2022 se logra una reducción, se habrá logrado el objetivo.

—Dijo que Lima debe tener visión de futuro y que “militares, presentadores de televisión o hijos de papá” no van a brindarla. ¿Esas características descalifican a un potencial alcalde?
No. Lo hacen los fundamentos que hay detrás de una frase muy corta, dicha en dos minutos. Lo que dije fue que las personas mencionadas no tienen la capacidad
necesaria.

—Mañana publicará las cuentas de su campaña. ¿Quién la financia?
Amigos o correligionarios. No es mucho dinero el que hemos gastado, nuestra campaña es austera.

—Bueno, tiene paneles en la Av. Paseo de la República.
Esos son los más costosos, es verdad, pero están debidamente financiados por gente cercana. Ahora hablar de cocteles está mal, pero hemos tenido algunas cenas y cosas así. Eso se va a conocer.

—De no ganar las elecciones, ¿continuará haciendo política en Acción Popular?
Es mi compromiso. Me inscribí hace un año y lamentablemente los problemas internos hacen que postule como independiente. Pero uno se casa buscando un matrimonio para siempre.

—¿Pensó lo mismo cuando postuló a Miraflores con Somos Perú?
Lamentablemente, hubo una situación no propiciada por mí, que generó un rompimiento. No podía quedarme un minuto más en Somos Perú por cómo estaba el partido. Creo que si Alberto Andrade resucitara, se volvería a morir.