En el 2009, el Poder Judicial encontró culpable a Antauro Humala de homicidio calificado, sustracción de armas de fuego, rebelión, secuestro y otros delitos en agravio del Estado (Foto: Rolly Reyna / Archivo Histórico de El Comercio)
En el 2009, el Poder Judicial encontró culpable a Antauro Humala de homicidio calificado, sustracción de armas de fuego, rebelión, secuestro y otros delitos en agravio del Estado (Foto: Rolly Reyna / Archivo Histórico de El Comercio)

Todo comenzó la madrugada del 1 de enero de 2005, aprovechando las celebraciones por el año nuevo. Al promediar las 4:30 a.m., un grupo de reservistas encabezado por Antauro Humala, entonces mayor del Ejército, irrumpió y tomó la comandancia de la policía de Andahuaylas; así como las armas, municiones y explosivos que ahí yacían. Eran unos 160 etnocaceristas, según los reportes de la época.