Las declaraciones vertidas por el ex presidente Alan García referidas a restaurar la pena de muerte en el Perú han despertado respuestas por parte de varios flancos. Ronald Gamarra, ex procurador anticorrupción, afirmó que dicha propuesta es una "cantaleta", y que denota "populismo y demagogia".
Alan García otra vez con la cantaleta de la pena de muerte. Puro populismo y demagogia. ¡No se puede aplicar en el Perú!— Ronald Gamarra (@ronaldgamarra) febrero 17, 2014
"La pena de muerte no resuelve el problema del crimen ya que no tiene un mayor poder disuasorio frente al crimen que otros castigos", indicó el jurista mediante su cuenta de la citada red social.
Gamarra sostuvo que el líder aprista "sabe muy bien que no se puede ampliar la pena de muerte a supuestos actualmente no contemplados o suprimidos", añadiendo que la pena capital produce consecuencias irreparables que impiden subsanar errores judiciales y eliminar las posibilidades de enmendar equivocaciones.
El abogado señaló que no existen evidencias que demuestren que dicho castigo resultaría más eficaz que los actuales para reducir criminalidad, haciendo hincapié en que más de dos terceras partes de los países del mundo han abolido la pena de muerte en su legislación o en la práctica, y en las obligaciones en cuestiones de Derecho Internacional asumidas por nuestro país.
"Los tratados internacionales de Derechos Humanos expresan la consolidación de una tendencia mundial y total abolición de dicho castigo. Los convenios suscritos por el Estado peruano lo obligan a no ampliar las causales de aplicación ni a reestablecer la pena de muerte", sentenció Gamarra.
Esta no es la primera vez que se instaura una polémica entorno a la pena capital. Anteriormente, la parlamentaria fujimorista Luisa María Cuculiza se mostró a favor de aplicarla, al igual que Fernán Altuve y Rolando Reátegui.