Martín Vizcarra cuestionó el accionar del Congreso frente a la reforma política. (Foto: Alonso Chero / Video: Congreso)
Redacción EC

Un anuncio sorpresivo realizó el presidente ante el pleno del Congreso de la República como parte de su discurso por Fiestas Patrias: la presentación de un proyecto de reforma constitucional para que las elecciones generales previstas para el 2021 se realicen un año antes, el 2020. 

Vizcarra hizo el planteamiento al pronunciarse sobre las decisiones del Congreso en torno a los seis proyectos de reforma política que su Gobierno sometió a cuestión de confianza en junio pasado.

Para el mandatario, el Parlamento hizo “caso omiso” a una de las iniciativas referidas a una reforma constitucional para que la inmunidad parlamentaria sea revisada por la Corte Suprema y no por el Parlamento, como ocurre actualmente y como finalmente mantuvo el Legislativo. “Es inadmisible que alguien, solo por ser congresista, no pueda ser juzgado”, manifestó.

En ese sentido, el presidente Martín Vizcarra se preguntó: “¿Dónde está la confianza que supuestamente el Congreso nos ha otorgado para trabajar la política anticorrupción? He recorrido el país de punta a punta en el último año y debo ser claro, no hay un lugar del Perú donde no haya recibido el reclamo de 'Presidente, cierre el Congreso'. ¿Alguien podría creer que esto es una simple coincidencia?”.

—Medida propuesta para referéndum—
Fue ahí cuando, al considerar que los peruanos no se sienten representados, instó a los congresistas a hacerse cargo de la realidad y sostuvo que, a juicio de su gestión, la confianza solicitada para la reforma política fue “aprobada solo de palabra y denegada en los hechos”.

“Por todo lo mencionado, propongo una salida a esta crisis institucional. Presento al Congreso una reforma constitucional de adelanto de elecciones generales, que implica el recorte del mandato congresal al 28 de julio del 2020. De igual modo, en esa reforma se solicita el recorte del mandato presidencial a esa misma fecha. La voz del pueblo peruano tiene que ser escuchada, por ello esta reforma constitucional deberá ser ratificada mediante referéndum. Esta solicitud la hago dentro del marco y respeto irrestricto a la Constitución Política del Perú”, sentenció.

Vizcarra, finalmente, ratificó su posición “aunque ello implique que todos nos tengamos que ir”.

La medida generó reclamos desde distintas bancadas. Vizcarra dejó este anuncio para el final de su discurso de casi dos horas, puesto que en la primera parte hizo un recuento de lo avanzado en su administración y luego realizó distintas promesas.