César Villanueva tiene una orden de 18 meses de prisión preventiva por el caso de la carretera San José de Sisa. (Foto: El Comercio)
César Villanueva tiene una orden de 18 meses de prisión preventiva por el caso de la carretera San José de Sisa. (Foto: El Comercio)
Redacción EC

Un nuevo testimonio de , exsuperintendente de en el Perú, se suma a la ya complicada situación legal del exgobernador regional de San Martín y ex primer ministro del actual gobierno, .

Fuentes de El Comercio señalaron que, en su declaración de este jueves, parte de una nueva ronda de interrogatorios en Curitiba (Brasil), Barata aceptó que coordinó con Eleuberto Antonio Martorelli, exejecutivo de Odebrecht, los pagos a Villanueva a cambio de que se beneficie a la constructora con la adjudicación de la carretera Cuñumbuque-Zapatero-San José de Sisa.

Martorelli fue representante legal de Odebrecht en la licitación por dicha obra, adjudicada a la empresa en el 2008, durante la gestión de Villanueva como gobernador regional de San Martín.

Según Barata, ambos coordinaron también los pagos para Marcos Díaz Espinoza, exgerente general del Proyecto Especial Huallaga Central y Bajo Mayo y mano derecha de Villanueva, así como para Celso Gamarra Roig, exfuncionario del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) y por entonces representante de una ONG que asesoró a la constructora brasileña con el fin de ser favorecida en la licitación.

Jorge Barata también confirmó que Odebrecht asignó a Villanueva con el ‘codinome’ ‘Curriculum Vita’; a Gamarra, como ‘Italiano’ y a Díaz como ‘Me Deus’ (Mi dios en castellano).

Y aunque el exejecutivo refirió al fiscal Hamilton Montoro que no conoce los montos exactos que pagó Odebrecht por la citada carretera, precisó que para corroborarlos está la ruta del dinero e información de la empresa GR Compliance, responsable de sacar una copia de los documentos de los servidores My Web Day y Drousys.

Montoro acudió en reemplazo del fiscal Germán Juárez Atoche, quien ayer estuvo en la audiencia en donde el juez Jorge Chávez Tamariz ordenó 18 meses de prisión preventiva para César Villanueva. El exgobernador regional, que permanece internado en una clínica de Jesús María, es investigado por los presuntos delitos de colusión, aprovechamiento indebido del cargo y asociación ilícita.

Jaime Bustamante, abogado de César Villanueva, no estuvo presente en el interrogatorio, puesto que llegó tarde. “También se ha cumplido con la diligencia del caso San José de Sisa. No hubo defensa legal, representación legal, del señor Villanueva”, dijo al respecto el fiscal Rafael Vela, coordinador del equipo especial del Ministerio Público para el Caso Lava Jato.

Bustamante manifestó a la prensa que pedirá las actas de la declaración.

-Declaraciones previas-

Jorge Barata ya ha declarado anteriormente sobre el caso. El pasado 6 de agosto, interrogado en Brasil, reveló que Villanueva recibió de Odebrecht dos pagos en efectivo de US$30 mil por la obra (US$60 mil en total), bajo el ‘codinome’ ‘Curriculum Vita’ para que la constructora se adjudique el proyecto. Acotó que Martorelli fue quien ordenó el pago.

El último lunes, Martorelli declaró ante el fiscal José Domingo Pérez y ratificó lo expresado anteriormente: que entregó US$30.000 a Villanueva durante a ejecución de la carretera, a través de Ricardo Paredes, exgerente de Contratos de la constructora en el Perú. Precisó que Barata autorizó el monto y que Paredes lo entregó al ex primer ministro en el 2010 en una “caja negra en un café de Surco”.

Cabe recordar que, además, en las planillas del Departamento de Operaciones Estructuradas figura un pago de US$320.000 en total para el exgobernador.

Martorelli también confesó que de la división de sobornos de Odebrecht se pagó US$100.000 para Gamarra Roig. Acotó que dicho monto está incluido en los US$400.000 que figuran en la planilla para dicho funcionario, bajo el apodo ‘Italiano’. Asimismo, dijo que e acercó a él en un evento en la Embajada de Brasil y le pidió US$20.000. Aceptó pagarlo y lo hizo a través de Ricardo Paredes.

Con información de Graciela Villasís, enviada especial de El Comercio a Brasil.