(Foto: USI)
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Paulo Rosas Chávez

El presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski (PPK), anunció el miércoles su decisión de reunirse con los integrantes de la comisión del Congreso que investiga el Caso Lava Jato.

Ello luego de que la presidenta de ese grupo, la fujimorista Rosa Bartra, mostrara un documento enviado por la empresa brasileña Odebrecht en el que señalan que pagaron US$782.207 a la firma Westfield Capital, empresa unipersonal de asesoría de banca de inversión vinculada a PPK, por siete consultorías que realizó entre noviembre del 2004 y diciembre del 2007.

Al respecto, el mandatario dijo que los ingresos que obtuvo como profesional "están debidamente registrados, tributados y bancarizados" y que "no hay nada indebido en ello".

"Reitero lo que ya dije en más de una oportunidad: en toda mi trayectoria como funcionario público jamás he favorecido a empresa alguna. Estoy dispuesto a aclarar todo lo que se tenga que aclarar ante el Congreso y el Ministerio Público", remarcó.

Durante la sesión del pleno de anoche, integrantes de la bancada de Fuerza Popular pidieron la renuncia de PPK a la Presidencia de la República. Ahora, el mandatario deberá analizar todas sus posibilidades que, de acuerdo a los analistas consultados, son dos.

-Un mensaje claro a la nación-
El analista político Arturo Maldonado sostiene que PPK también estaría en la posibilidad de "dar un mensaje a la Nación en el que explique claramente su relación con Odebrecht".

De esa manera, añade Maldonado, el presidente daría "un poco de estabilidad a su gobierno", además de que "no cedería completamente al fujimorismo".

Esta alternativa también es respaldada por el periodista y analista político Pedro Tenorio, quien considera que el mandatario "debería ser ser mucho más detallado en su mensaje, mucho más transparente y decir si ha asesorado a otras empresas que son investigadas".

Desde su punto de vista, "el presidente tiene que ser claro y decir la verdad", pues hay "la impresión de que el silencio que ha guardado hasta ahora era producto del miedo".

Sobre el mensaje que ofreció ayer el mandatario, en el que acepta reunirse con la Comisión Lava Jato, Tenorio dijo que "da la sensación de alguien que está ganando tiempo mientras reflexiona mejor qué debe hacer". Añadió que "no quita la posibilidad de que en las siguientes horas pueda hacer un deslinde más claro".

-Solución drástica-
En tanto, Tenorio advierte que "la fragilidad política" del presidente, producto de su bancada minoritaria en el Congreso, podría eventualmente enfrentarlo a un pedido de vacancia, lo que configuraría "un escenario muy delicado".

Para el ex ministro del Interior y analista político Fernando Rospigliosi, un escenario como ese o uno de renuncia al cargo sería inminente "si se confirma la veracidad de la información" revelada ayer.

"[De ser verdad,] las posibilidades de renuncia o vacancia por juicio político son inminentes, porque implicaría que actuó de manera deshonesta", opinó.

Rospigliosi refiere que si PPK se negó a ir a la Comisión Lava Jato con anterioridad fue "porque tenía miedo" y que su próximo encuentro con el grupo no tiene ya mucho sentido.

"Su situación ha llegado a un punto en el que no hay retorno. [...] Ya no tiene salida. Creo que esto va a crear un episodio de inestabilidad muy perjudicial para todo el país, una situación indeseable", estimó.

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