Vicente Zevallos
Vicente Zevallos
Fernando Vivas

Su bancada lo votó a mano alzada como nuevo vocero en reemplazo de Carlos Bruce. tendrá que traducir al presidente –tarea complicada– en nombre de los 15 miembros de su grupo (eran 18, pero a uno lo botaron y 2 pasaron a ser ministros) a la abrumadora mayoría opositora. Se lo está tomando con calma.

— ¿En qué términos describe el mensaje de su líder presidente?
Ponderado, impregnado de realismo, dando a su vez un mensaje de unidad y de optimismo.

— ¿Realista respecto a sus sueños del año pasado?
Es natural que en un político haya mucha ilusión al empezar una gestión. Pero transcurrido un año, empieza con un gesto bastante hidalgo, que es reconocer que subestimó en exceso la situación económica del país y a renglón seguido pidió disculpas.

— ¿Esa subestimación de Lava Jato implica que fue un error insistir en la adenda de Chinchero?
Creo que hubo un impulso por darle prioridad a la inversión pública y privada y se actuó de buena fe. Faltó ser más cauto. Hubo que dar marcha atrás y dos ministros tuvieron que dejar sus carteras.

— La congresista Ana María Choquehuanca ahora es ministra y ya lo era Pedro Olaechea. ¿Han hablado de cuotas con el presidente?
Varios integrantes ya fueron ministros, como Mercedes [Aráoz], Gino [Costa], [Carlos] Bruce y [Juan] Sheput, y han sido cercanos al presidente en la campaña. Al inicio pensamos que algunos serían ministros, pero el presidente dijo que ya éramos una bancada pequeña y ninguno fue convocado. En el curso del trabajo fueron convocados Olaechea y Choquehuanca. No hemos hablado de cuotas con el señor presidente, pero debe ser ponderado. Con menos de 15 nos veríamos muy debilitados.

— Sheput y Aráoz quieren ser ministros.
Mas allá de sus deseos, están sus méritos personales y seguro que en algún momento serán tomados en cuenta, pero ahora no sería bueno.

— ¿Están satisfechos de su relación con el presidente o deberían reforzarla?
Nos reunimos cada 15 días y es un diálogo fraterno. Nos da espacios para intercambiar opiniones y alcanzar sugerencias, pero es su potestad tomar decisiones. Una vez a la semana nos reunimos con el primer ministro Zavala.

— Disculpe la impertinencia. ¿Es cierto que tienen un chat con él?
[Ríe] Hay un nivel de comunicación fluida, es todo lo que le puedo decir.

— ¿Mejoró la relación con Fuerza Popular luego del encuentro entre PPK y Keiko Fujimori?
No podemos negar que ha mermado la agresividad que expresaban algunos parlamentarios, lo que no significa que haya desaparecido.

— ¿Luis Galarreta ha cambiado con su nuevo rol en la Mesa Directiva?
El mensaje de Luis es bastante auspicioso. No solo habló de correlación de fuerzas, sino de tender puentes. Luis, con la experiencia que tiene, va a usar su perfil para reposicionarse. Un aspecto que preocupa [del Congreso] es la producción legislativa débil. Sobre la reforma electoral no se avanzó casi nada. Han puesto énfasis en la fiscalización. Pero hay otra función creativa, dar el marco normativo óptimo. [Por ejemplo], se han puesto en evidencia las graves circunstancias del proceso de descentralización. Eso pasa por un nuevo marco normativo.

— Usted ha sido alcalde en Moquegua, un hombre de gestión. La vocería requiere capacidad de réplica.
Ha habido una actitud constructiva del anterior vocero, Carlos Bruce. Intentaré impregnar mucha prudencia, argumentación y oportunidad a la vocería. No permitiré ni mucho menos alentaré actitudes que traspasen el limite de la ponderación.

— Guido Lombardi habló de ganapanes.
Lo hemos conversado con Guido y creo que obedeció a una circunstancia del momento. Obviamente, esos calificativos pueden considerarse una provocación.

— El primer ministro Zavala está debilitado y tiene bastante con dos carteras, ¿cómo van a encarar eso?
Hemos tenido una comunicación permanente con él. Es un buen articulador. Fue el gran impulsor del proceso durante El Niño costero. Le ha tocado asumir la cartera del MEF antes de sustentar el presupuesto de la república, es una tarea delicada y tiene que hacerse antes de noviembre. Un cambio de ministro debilitaría esa tarea.

— O sea, en noviembre evaluarían la conveniencia de su duplicidad de funciones.
Es una evaluación permanente. Sin embargo, le estoy poniendo sobre la mesa un argumento fáctico, la ley de presupuesto, eso tiene que sustentarlo el ministro.

— Una designación cuestionada es la de Fiorella Molinelli en el Midis. Sabemos que hay el plan de fusionar el Midis y el MIMP. ¿Eso da un plazo para que ella deje de ser ministra?
Es cierto que ya se viene trabajando en eso, pero todavía a nivel de propuesta. Pensar que la designación de Molinelli podría tener el sentido de que luego se posicione mejor, definitivamente no. Si me pregunta, le digo que, en lo personal, estaría en desacuerdo [con la fusión].

— Respecto a las perspectivas que se abren para el presente año, ¿qué lección han sacado de Chinchero?
La primera lección es que no nos gane el entusiasmo de la inversión. Yo descarto que haya un mal interés. Fue una buena circunstancia que se haya inaugurado el túnel Gambetta, que impulsará al Jorge Chávez, y que se haya anunciado el destrabe de la línea 2 [del metro] y de proyectos mineros importantes.

— Sentí una aparente contradicción cuando el presidente dijo que no iba a provocar un gasto público desenfrenado y habló de varios proyectos y puso a los Panamericanos de ejemplo.
A veces, al presidente le gana lo técnico. Se refería al componente del gasto ordinario, al desmesurado incremento de remuneraciones. Estaba dando un mensaje indirecto a las exigencias inalcanzables de aumento de sueldos.

— Sus críticos atribuyen al Gobierno que es de amigos y de lobbies. ¿Qué piensa de la designación de Susana de la Puente como embajadora en Londres?
No tengo la suerte de conocer a Susana de la Puente, creo que tiene las capacidades de tender puentes para los acuerdos comerciales después del ‘brexit’. Desde la campaña tenemos el cliché de lobbistas y grupo de amigos. No tenemos esa lectura.

— ¿Cuál es su reto como vocero?
Hacer los mayores esfuerzos por tener una bancada sólida, bien argumentada, con impacto en cada comisión.