El cuidador se propuso acariciar y besar a Pippin a diario, así que el burro poco a poco se fue convenciendo del amor que le daban en el santuario.
(Captura Facebook)
El cuidador se propuso acariciar y besar a Pippin a diario, así que el burro poco a poco se fue convenciendo del amor que le daban en el santuario. (Captura Facebook)

En se ha vuelto viral la historia de un burro de 15 años que fue rescatado por el Santuario Compasión Animal de España. Los fundadores de esta asociación decidieron darle una segunda oportunidad a este animal que ha sufrido a lo largo de su vida.

Cuando los rescatistas encontraron a Pippin, el asno estaba en un pequeño corral, todo su cuerpo tenía arañazos y su cara estaba sucia. Apenas podía levantar la cabeza, ya que se encontraba muy cansado y lastimado.

Al ver esta situación, los hombres no lo pensaron dos veces y decidieron llevarse al burro para darle una mejor calidad de vida, así que Pippin fue trasladado al santuario, pero nada fue fácil.

El animal era bastante asustadizo debido a su anterior vida. Cada vez que sus cuidadores trataban de barrer cerca de él, se asustaba y corría lo más lejos posible. También se ponía muy nervioso si tocaban sus orejas.

Pippin había sufrido mucho, ya que sus pezuñas estaban muy maltratadas y sus músculos estaban débiles debido a la mala alimentación y no tuvo suficiente espacio para hacer ejercicio.

Pero poco a poco el asno comenzó a confiar en las personas y más en Alberto Terrer, el hombre que decidió salvarle la vida y darle una nueva oportunidad, así que todos los días se le acercaba para darle besos y cariños, así fue que se creó un vinculo muy especial entre el hombre y el animal.

El cuidador se propuso acariciar y besar a Pippin a diario, así que el burro poco a poco se fue convenciendo del amor que le daban en el santuario y como retribución el animal lo acaricia con su nariz y también le daba besos.

Esta tierna historia se ha vuelto viral en Facebook, ya que demuestra el cambio radical que ha tenido este burro y gracias al amor que le han brindado los cuidadores de esta asociación.

Ya ha pasado más de un año desde que Pippin fue rescatado, y se ha vuelto más cariñoso con Alberto y con sus nuevos amigos. El burro ama los voluntarios del santuario, a los otros burros y las vacas. Los ama casi tanto como a su cuidador que se propuso darle amor y una segunda oportunidad para que disfrute de la vida.

El video fue publicado en facebook y actualmente cuenta con más de nueve mil reacciones, cinco mil comentarios y más de 170 mil reproducciones.

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