(Foto: Difusión)
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Redacción EC

Por efecto del uso normal, hay componentes que se desgastan y dejan de cumplir su función de manera óptima luego de cierto kilometraje de recorrido. Además, la incorporación de avances tecnológicos, con un mayor número de componentes electrónicos y los motores más sofisticados ayudan a aumentar el margen de seguridad y la eficiencia del vehículo. "Para garantizar todas estas ventajas es muy importante darle el servicio de mantenimiento adecuado al auto, de acuerdo a lo descrito en la libreta de garantía del fabricante", explica Juan Felipe Salgado, director de negocios de Subaru.

Es importante recordar, que la falta de mantenimiento puede derivar en una avería mecánica, y en el peor de los casos, incluso en un accidente.

A continuación, los expertos de Subaru te muestran a algunos de los consejos imprescindibles que debes tomar en cuenta para garantizar el buen estado de tu auto.

1. El primer mantenimiento. Este es un punto esencial cuando tu auto es nuevo, Subaru siempre recomienda llevarlos al Servicio Autorizado al cumplir los primeros 1500 kilómetros. Este servicio suele ser gratuito, luego de ello deberás llevarlo cada 7500 kilómetros para que no presente ningún inconveniente.

2. La importancia del Servicio Autorizado. Muchas personas tienen ya un mecánico de confianza, o prefieren llevar su auto nuevo a algún taller para ahorrarse costos. Sin embargo, esto afectará su garantía, ya que solo el Servicio Autorizado de la empresa tiene la total fiabilidad para darle a tu automóvil el cuidado que necesita.

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3. Check list obligatorio para tu auto. Al visitar el Servicio Autorizado, los técnicos deberán completar un check list de mantenimiento integral aprobada por la fábrica del vehículo. Esta lista de verificación incluye inspecciones del rendimiento de su motor y transmisión. Además, para preservar la seguridad de su automóvil se debe hacer una revisión de sus frenos, dirección, sistema de escape, suspensión y sistema eléctrico.

4. Controla el aire de tus neumáticos. Una vez al mes y antes de cualquier viaje por carretera largo, usa un medidor de presión de neumáticos para verificar la presión de inflado en cada neumático, incluido el de repuesto. Hazlo cuando los neumáticos estén fríos, es decir antes de que se haya conducido el vehículo o después de no más de un par de millas de conducción. Unos neumáticos con la presión adecuada mejoran la calidad de la conducción.

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5. Revisa el aceite del motor. Hazlo de manera regular, mensualmente si tu vehículo está en buenas condiciones; más a menudo si observas una fuga de aceite. El automóvil debe estar estacionado en una superficie nivelada para que pueda obtener una lectura precisa de la varilla de medición. Si encuentras una fuga, busca repararlo pronto.

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