Las ‘burriers’ europeas Michaella McCollum Connolly y Melissa Reid, de nacionalidad irlandesa y británica, respectivamente, solicitaron ante el juez del Cuarto Juzgado Penal del Callao, Pedro Miguel Puente Bardales, acogerse al beneficio de la terminación anticipada. Ambas aceptaron expresamente haber querido transportar droga a Europa.

La razón es que ambas procesadas podrán obtener beneficios penitenciarios debido a que la terminación anticipada permite que el proceso se abrevie significativamente. La audiencia se realizó hoy en forma reservada en una sala de juzgamientos del penal Sarita Colonia del Callao.

La terminación anticipada se sustenta, como en este caso, en la aceptación de los cargos imputados. Ambas se acogieron a este procedimiento al ser requeridas por el magistrado Puente Bardales y señalaron que sabían que iban a trasladar droga y que se arrepienten de haber participado en un hecho como este.

Me siento muy mal por el dolor que le causo a mi familia. Asumo la total responsabilidad, dijo Melissa Reid en su respectivo turno. Michaella se expresó en términos similares.

Previamente, cada una de las acusadas expuso las circunstancias en las que se desarrolló el acondicionamiento y traslado del estupefaciente, así como los contactos con los que coordinaron dicha transacción.

El representante del Ministerio Público acogió la posición de las encausadas. La audiencia de terminación anticipada en la que debe continuar el proceso se realizará el próximo 1 de octubre.

El 6 de agosto, las extranjeras fueron descubiertas con 5.700 kilos de clorhidrato de cocaína, en el caso de McCollum; y 5.800 kilos en el de Reid, acondicionados en sus equipajes. Las dos pretendían viajar a Gran Bretaña. Según el artículo 296 del Código Penal, ambas podrían recibir una pena de entre 8 y 15 años de cárcel.