De siete balazos fue asesinada mientras dormía en su cama una mujer identificada como Hilda Saldarriaga Bracamonte, considerada testigo clave en la investigación sobre el atentado del 20 de julio del 2010 contra el ex consejero regional de Áncash, Ezequiel Nolasco. En ese ataque murió el hijo de la otrora autoridad.

El crimen de la mujer apodada ‘mama’ ocurrió aproximadamente a las 2 a.m. en el inmueble ubicado en el lote 1, manzana W del asentamiento humano Tahuantinsuyo, en Nuevo Chimbote, reportó la colaboradora de El Comercio en dicha zona, Cristina Fernández. Fueron dos sujetos los que ingresaron al lugar violentando un triplay, pero según informaciones preliminares, un hijo de la víctima habría reconocido a uno de los asesinos.

Policías llegaron a la casa para realizar las investigaciones del caso que se suma a la ola de violencia y sicariato en Áncash. El cadáver fue llevado a la morgue.

Saldarriaga Bracamonte era considerada testigo clave del proceso luego de que señalara al alcalde provincial del Santa, Luis Arroyo, como autor intelectual del atentado a Nolasco. En el 2010, este último se perfilaba como uno de los principales candidatos a asumir la presidencia regional de Áncash de forma interina mientras César Álvarez tomaba licencia para postular a la reelección.

Nolasco era voceado para remplazar a Luis Sánchez Milla, encargado de la presidencia regional que fue asesinado el 12 de julio del 2010.

Luego de sindicar a Arroyo, Hilda Saldarriaga se retractó y aquel –actual autoridad- fue excluido del proceso.

En tanto, en declaraciones a medios locales, Nolasco dijo esta mañana que justamente Arroyo era el más beneficiado con el asesinato de Saldarriaga.