FABIOLA TORRES LÓPEZ Unidad de Investigación/El Comercio
Desde hace un año, el Fondo de Vivienda Policial (Fovipol) descuenta a 502 agentes en actividad S/.580 mensuales de su sueldo por casas en el conjunto habitacional La Estancia de Lurín, lo que consideran hoy la más grande estafa de sus vidas.
Marisol Vásquez, Gladys Ruiz y Julissa Torres son esposas de policías que forman parte de este grupo y dan la cara porque a ellos su institución les impide declarar a la prensa. Sus casas, como todas las que está entregando la constructora DPI en La Estancia de Lurín, se hicieron sobre terrenos en litigio y presentan rajaduras.
Además, carecen de agua potable y electricidad porque la empresa no cumplió con los trámites de habilitación urbana del proyecto. Esto les contestó Sedapal y Luz del Sur cuando reclamaron. Y también lo corroboró este Diario.
¿Quiénes deben responder por este pésimo negocio inmobiliario? El 27 de agosto pasado, El Comercio reveló que DPI, de propiedad del empresario Rodolfo Banchero Zavala, recibió S/.45’153.869 de Fovipol por 502 casas en planos en La Estancia de Lurín el 2011.
No existió concurso público para este proyecto habitacional, solo un convenio de cooperación estratégica entre la policía y la constructora para venderles a cientos de agentes las viviendas. Pero de ese acuerdo ni siquiera los plazos de entrega de las casas se cumplieron.
EXISTÍAN ANTECEDENTES Este Diario expone ahora importantes indicios que demuestran que dos directorios de Fovipol, los presididos por los generales PNP Néstor Zegarra Silva y Víctor Castañeda Parrales, entre el 2011 y 2012, autorizaron el negocio inmobiliario con la empresa de Rodolfo Banchero, aún cuando conocían que las tierras del proyecto habitacional La Estancia de Lurín estaban en litigio.
Ambos directorios de Fovipol no pudieron ignorar este problema porque Rodolfo Banchero, quien acumula 23 denuncias por estafa activas en fiscalías penales de Lima, hizo otras 976 viviendas para la policía en La Estancia de Lurín entre el 2004 y 2010 a través de sus empresas Inversiones MyS (ahora Helios Invesment) y Negociaciones Ara del Norte.
Y todas las edificaciones tuvieron el mismo problema: los terrenos donde se construyeron arrastraban litigios por la propiedad. José de la Cruz Páucar, presidente de la Asociación de Propietarios de La Estancia de Lurín, señala que ninguna de las casas vendidas por las empresas de Banchero en esta zona tiene hoy documentos en regla.
Inversiones MyS y Negociaciones Ara del Norte no han formalizado la declaración de fábrica, independización e inscripción de las casas en Registros Públicos. Lo mismo sucede con las casas construidas por DPI.
Rodolfo Banchero tuvo la suerte de ser uno de los empresarios constructores favoritos de Fovipol durante los gobiernos de Alejandro Toledo y Alan García y de continuar haciendo negocios con la policía bajo el actual régimen.
LA INVESTIGACIÓN FISCAL Desde junio pasado, la Primera Fiscalía Anticorrupción investiga por malversación de fondos y colusión a un directorio de Fovipol y a la empresa DPI debido a las condiciones en que fueron vendidas las últimas 502 casas en La Estancia de Lurín el 2011.
El caso comprende hasta el momento al general PNP Víctor Castañeda Parrales y a los coroneles PNP Manuel Ponce y Marborotto, Manuel Guerrero García, Jorge Palacios de la Cruz, Pedro Vargas Ramírez y Omar Navarro Egúsquiza.
Sin embargo, ello no impide que cientos de policías sigan sufriendo el recorte mensual de sus sueldos para pagar viviendas sobre las que desconocen si algún día tendrán títulos de propiedad. Cada casa fue vendida en S/.96 mil y muchos policías firmaron créditos con Fovipol por 20 años.
La angustia de estas familias, agrupadas en la Asociación de Propietarios de La Estancia de Lurín, crece cuando ven que las paredes de sus viviendas presentan rajaduras y que los techos filtran el agua cuando llueve. La asociación acudió al director general de la policía, Jorge Flores, y al ministro del Interior, Wilfredo Pedraza, pero no atendieron el reclamo.
VARIOS CASOS RÉCORD DE DENUNCIAS Desde el 2003 hasta la fecha, el empresario Rodolfo Banchero Zavala, de 75 años, acumula 27 denuncias por estafa en 22 fiscalías provinciales penales de Lima. Cuatro fueron archivadas, una está en etapa de formalización y el resto se encuentra con dictamen. En la mayoría de los casos, Banchero ha apelado a la prescripción de los delitos.