Gabriel Prado ya no es más presidente del directorio y junta de accionistas de la Empresa Municipal Administradora de Peaje (Emape), luego de la denuncia periodística que dio cuenta de que la Municipalidad de Lima, a través de la Gerencia de Seguridad Ciudadana que entonces dirigía el citado funcionario pagó 40 mil soles para alquilar circulinas por seis semanas para vehículos de serenazgo. Como se informó, estos fueron presentados el pasado 15 enero, pero hoy todavía no están activos.
El lote de unidades no puede ser usado por el Serenazgo de Lima porque los vehículos no tienen placa, ni SOAT, ni documento de propiedad, según el reporte del programa de TV “Cuarto poder”, que da cuenta de supuestas intenciones de sorprender a propios y extraños anunciando la salida de una flota de vehículos que todavía no está lista.
VILLARÁN RESALTA LABOR DE PRADO En su carta de renuncia, que tiene la fecha de hoy, Prado se dirige a la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, para manifestar: “…Me siento en la obligación de presentar mi renuncia a las funciones que ejerzo en su administración, a fin de que estos hechos sean esclarecidos a través de una adecuada investigación administrativa”.
Por su parte, en su carta de respuesta, más allá de cualquier recriminación, Villarán de la Puente agradece a Prado “este gesto de desprendimiento en aras de la transparencia para facilitar la investigación administrativa de los hechos en cuestión”.
La burgomaestre resalta que el cuestionado funcionario ha tenido un “gran compromiso” con su gestión y ha afrontado “como pocos en mi administración” retos al servicio de los vecinos.