El cadáver de Ramón Castillo Gaete, el chileno buscado internacionalmente por haber liderado un ritual en el cual quemaron vivo a un bebe de dos días de nacido, se ahorcó sin ayuda de nadie, según confirmaron los exámenes realizados al cuerpo.

El fiscal adjunto de turismo en Cusco, Wesley Astete Reyes, dijo para RPP que la necropsia concluyó aproximadamente a las 5 p.m. y confirmó que el sujeto murió ahorcado por acción mecánica. “Descartamos la presencia de una mano ajena”, señaló.

A pesar de esta información, todavía no se ha podido concluir la hora exacta del suicidio, pero ya se han tomado todos los datos necesarios del cadáver, con los cuales se llevarán a cabo varios análisis cuyos resultados se conocerán en un lapso de 15 a 30 días.

“No tenemos ninguna persona que esté reclamando el cuerpo ni comunicación de la embajada chilena para disponer si se lo entregamos al gobierno de Chile o a algún familiar”, añadió antes de detallar que no hay un plazo definido para esperar que algún cercano a Castillo solicite la entrega de sus restos.

FELICITÓ EL CERCO POLICIAL Por último, Astete Reyes felicitó el trabajo de la policía por dejar “sin escapatoria a esta persona” a través del cerco que se fue cerrando en Cusco. Al sentirse arrinconado, el criminal chileno habría tomado la decisión de matarse, según el fiscal.