SANTIAGO GÓMEZ PARIENTE
Todavía son terrenos áridos y poco vistosos, pero las más de 300 familias que viven en sus alrededores saben que esos serán sus parques y los parques de sus hijos: las futuras áreas verdes de Manchay. Así también lo establecen los planos del municipio de Pachacámac. Pero estos dos lotes, que suman casi 24 mil m², son acechados por invasores que, de modo amenazante, merodean como lo hace el mejor cazador al vigilar a su presa.
La alerta de una posible invasión violenta se dio hace cuatro días, cuando unos sujetos instalaron una especie de choza en el área catalogada como Parque N°2, de 10 mil m², correspondiente al sector H del poblado Huertos de Manchay. “Vinieron con papeles fraguados e instalaron su choza. Para eso retiraron los árboles que habíamos comenzado a plantar”, señaló un dirigente de ese sector que prefirió no dar su nombre porque dijo haber sido amenazado.
Los vecinos frenaron la incursión, pero ayer unos 10 sujetos volvieron a la zona para vigilarla, tal como lo comprobó El Comercio en un recorrido. “Somos un pueblo pacífico, nuestros hijos caminan por aquí y no es posible que vengan a meternos miedo”, comentó el dirigente Adriano Yarce, de la zona G, donde está el otro parque en riesgo: el Parque Principal.
Esta área tiene 13.890 m² y sumada al otro parque son equiparables a casi cinco campos de fútbol. El municipio de Pachacámac refrendó estas dimensiones en agosto del 2007, cuando los vecinos de los sectores G y H tramitaban sus títulos de propiedad y definían las características de la futura ciudad de Manchay.
Como varias zonas periféricas de Lima, Manchay se fue formando con invasiones. Sin embargo, casi todos los poblados o barrios oficiales que la conforman fueron ganando derechos con los años. No es raro ver a dirigentes y vecinos enorgulleciéndose de haber construido ellos mismos su poblado.
Con todo, a Manchay no le sobran áreas verdes. Para la jefa del Servicio de Parques de Lima (Serpar), Anna Zuchetti, el déficit es preocupante. La funcionaria estimó que en este poblado habría menos de un m2 de áreas verdes por habitante. El promedio en Lima Metropolitana es de 2,9 m² por habitante.
NI LA ZONA CÉNTRICA SE SALVA La alarma de una posible invasión fue llevada por los vecinos a la comisaría local. Sin embargo, la cercanía de esta dependencia policial con la zona en riesgo (unos 200 metros) no ha rendido mayores frutos.
“Aún no ha habido ningún hecho grave. Nadie reportó un delito”, contó a este Diario en un primer momento el oficial de mayor rango en esa delegación policial. Más tarde, el mismo policía admitió saber de la posible invasión.
A una cuadra de la zona que rondan los invasores está también la Plaza de Armas de Manchay. Metros más arriba, se ubica la institución educativa San Francisco de Asís. Este Diario intentó obtener la versión del municipio distrital, pero debido al feriado ningún funcionario pudo atendernos.
ALERTA DEL MINISTERIO DE CULTURA* Unas 23 zonas arqueológicas de la Región Lima estuvieron ayer bajo alerta de invasión por el feriado, dada por el Ministerio de Cultura. Hasta el cierre de esta edición, El Comercio confirmó que en ninguna de estas áreas hubo emergencias.
INVASIONES EN ÁREAS PROTEGIDAS 20/7/2009 La comisaría Diez de Octubre informa que unas 2 mil personas invaden la reserva Canto Grande, en San Juan de Lurigancho.
25/4/2012 Alerta de invasión al sitio arqueológico de Molle, Cieneguilla, entre el 27 de abril y el 1 de mayo.
29/6/2013 Una de las doce pirámides de la huaca El Paraíso es destruida. Cultura acusó a la empresa inmobiliaria Alisol S.A.C. de ser la responsable.
13/7/2013 La huaca Melgarejo, en la avenida La Fontana, aparece con pintas y grafitis. Los vecinos señalaron que no hay vigilancia.
14/8/2013 Invaden la zona arqueológica Necrópolis Miramar de Ancón. El Ministerio de Cultura presentó dos denuncias ante la fiscalía por la invasión de 15.000 m² de este sitio.