La afluencia de compradores en Mesa Redonda, en el centro de Lima, ya se aprecia en mayor número por estos días y se espera que más personas acudan al emporio comercial por las fiestas de Navidad y Año Nuevo.

Pero la zona no tiene una imagen que garantice total seguridad. En un recorrido, varios compradores expresaron su preocupación al respecto.

Lo que se aprecia son aglomeraciones, carretilleros que incomodan el camino de los compradores, ambulantes, productos de las galerías que obstruyen las veredas y cables enredados en lo alto de los inmuebles.

Días atrás, se corroboró justamente que unos 3 mil vendedores ambulantes ocupan los jirones Puno, Ayacucho, Andahuaylas y Cusco entorpeciendo las rutas de evacuación en casos de emergencias.