El martes 17 de setiembre, un camión con 12 toneladas de capacidad se salió de control cerca de la Panamericana Sur, en Villa El Salvador, y mató a dos personas. También dejó a varios heridos, pero el más grave de ellos es un menor de 16 años que estaba dentro del quiosco que fue completamente destruido en el incidente.
Mi hijo, clínicamente, ya está muerto y solo su corazoncito está latiendo. Estamos esperando el milagro pero, si Dios se lo quiere llevar, será su voluntad y yo no puedo hacer nada, dijo el padre del joven, César Bajal.
El menor permanece dentro del hospital María Auxiliadora, donde se mantiene con vida pero con muerte cerebral.
El SOAT no está cubriendo al 100% las medicinas y no cuento con los recursos. He tenido que prestarme para poder comprarlas y voy a buscar la manera de que el SOAT me reconozca lo que estoy gastando con mi hijo, añadió.
TRABAJO TEMPORAL Bajal detalló que su hijo estaba trabajando en el quiosco por decisión propia y de 6 a 10 de la mañana algunos días, sin dejar de lado sus estudios. Tenía una semana recién que estaba ahí atendiendo, comentó.