El vuelo saldr de Lima. Previa escala en Cusco, llegar a Puerto Maldonado, capital de la regin Madre de Dios, a pocas horas de la frontera con Brasil y Bolivia. Ya en tierra, el bochorno y la humedad son una suerte de susurros tmidos de lo que se viene. Aventura pura y calma en la selva amaznica. Aventura y calma, a la vez o alternadas.
Desde el aeropuerto, para llegar a nuestro destino, un lodge en el corazn de la jungla peruana, hay que tomar una va que alguna vez fue asentada y plana, pero que las lluvias y el abandono humano han hecho digna de un rally exigente. A los lados de la trocha, cultivos de papayas, algo de ganado vacuno, invasiones y puentes a medio hacer. Promesas incumplidas que hemos ido acumulando, nos cuenta nuestro gua. La carretera nos lleva a Infierno, pueblo de inusual nombre al pie del ro Tambopata, donde tomaremos una lancha con destino a la reserva natural del mismo nombre. Dejamos Infierno, vamos al esperado paraso.
Mientras vamos sobre el ro Tambopata, y los rboles son una suerte de teln de lo que veremos luego a ambas orillas, nuestro gua nos dice lo que haremos en los tres das que estaremos en su compaa.
DAS INTENSOS El proyecto de ecoturismo Posada Amazonas consiste en un acuerdo entre los pobladores de Infierno y un grupo de empresarios limeos. Estos los capacitarn y les darn empleo en el hotel y en los servicios tursticos que brinda. Luego de 20 aos, periodo que acabar en 2016, sern los propios pobladores los encargados de administrar y dirigir el proyecto.
Es en la Posada Amazonas donde nos quedamos, una amigable construccin en madera, el centro de operaciones para comenzar a conocer la naturaleza. Qu mejor que verla desde las alturas? Es as que luego de una caminata llegamos a una torre que se eleva a 47 metros para ver el atardecer sobre la selva, mientras se ven pasar dos guacamayos, se escucha el grito de los monos aulladores y otros animales desconocidos para los citadinos. Es fcil imaginarse el grito de un otorongo mientras que el sol se oculta y convierte el cielo en todos los matices que pueden existir entre el rojo y el azul. De a pocos, mientras todos guardan silencio, las primeras estrellas aparecen. Bajemos e iremos al hotel, vayan a dormir, maana ser un da duro, nos advierte el gua. Empezaremos a las 5 de la maana.
Es probable que al inicio cueste un poco dormir. Es que pocas veces se concilia el sueo con todos los sonidos de la selva imaginables. No obstante, el cansancio gana.
LA GENTE Ningn viaje que se precie de ser recordado como exquisito se remite solo a cumplir una lista premeditada o espontnea de actividades. Las personas que se conocen en el camino enriquecen la experiencia. Es as que de la boca de nuestros guas nos enteramos que la comunidad nativa de los ese eja es la que domina este territorio. Que las familias Mishaja y Pesha protagonizan desde tiempos inmemoriales una versin selvtica de los Capuleto y Montesco, aunque siempre ha predominado la armona. Que Infierno es llamado as porque eso era el lugar para los primeros extranjeros que llegaron con la explotacin del caucho, europeos y japoneses que jams pensaron estar en una de las junglas ms salvajes del planeta. Que los ese eja se redujeron a su mnima expresin durante esa sangrienta poca de esclavitud. Que el turismo ha salvado a muchos, que la minera es una amenaza, que la deforestacin parece casi un castigo injusto.
Cipriano, el sabio gua, nos dice que su padre es boliviano, uno de los que vino para explotar el caucho. Se cas con una descendiente de ese ejas. Que le da pena no hablar el idioma de sus ancestros maternos. Es que en mi poca no haba escuelas bilinges, dice, pero que pese a ello conoce algunas historias. Que quiere especializarse en guas de birdwatching, la observacin de aves y la bsqueda de nuevas especies aladas. En el camino se le escucha hablar ingls con una sorprendente familiaridad. Ello, nos cuenta, es parte de la capacitacin por la que todos los que brindan servicios pasaron.
El proyecto turstico ha ganado varios premios a la autosostenibilidad, por respetar el medio ambiente y por ser un ejemplo de cmo la inversin (hotelera) puede respetar el entorno y crecer con la gente del lugar. Juntos.
LA AVENTURA La laguna Tres Chimbadas se cre de forma natural, cuando el ro Tambopata cambi de curso. Hoy, esta parte, alejada del cauce actual del ro, luce unas seductoras aguas oscuras y sus orillas son el hogar de nutrias y caimanes que, con un poco de suerte, se dejarn ver. Es aqu donde venimos con los primeros minutos de luz natural a pescar piraas. Toda una aventura para ver de cerca a estos animales, uno de los favoritos para los directores de pelculas de terror. Nos cuenta Jess, otro de los guas, que hasta hoy muchos se baan en estas aguas sin problemas y que nunca ha habido un accidente con piraas. Situacin poco imaginable para un citadino cuando ve que varios ejemplares se disputan la carnada con una voracidad digna de un len hambriento.
Mientras pescamos sobre un catamarn nos cuentan que en esta laguna o cocha hay al menos 17 especies de peces y que el shansho es el ave que domina esta parte de la reserva. Se trata de un ser de plumas escarlatas que emite sonidos graves.
Es probable que a estas alturas ya se le haya pasado por la cabeza dejar todo y quedarse en el paraso. Lo que viene no har ms que reforzar esta idea. Podr caminar por la selva en busca de nuevas especies, por ejemplo. Toparse con ranas multicolores, monos aulladores, complejas colonias de hormigas y aves jams observadas ser una experiencia enriquecedora. Por la noche, si las condiciones son ptimas, salir en una lancha a ver caimanes, nos recordar que la selva es de ellos.
Al da siguiente, hacer canotaje en las tranquilas aguas del Tambopata permitir ordenar ideas que estaban inconexas en la ciudad. Mientras que los pulmones se llenan de aire puro, una bandada de guacamayos cruza el cielo y pequeas lanchas aparecen de vez en cuando. Luego, ya en tierra, podr ir a esperar la llegada de decenas de guacamayos a una collpa, un banco de barro al que suelen llegar para alimentarse de la tierra, una fuente de minerales irreemplazable en su dieta. Hay un espacio cercano a la collpa acondicionado para que los visitantes puedan apreciar a las aves sin que ellas vean a los intrusos y se intimiden con su presencia. Aqu la paciencia es la clave: pueden pasar varias horas para ser testigo del espectculo de colores.
Entre actividad y actividad, o al caer la noche, el lodge es un lugar acogedor para esperar la siguiente aventura. Siempre con el verde de los rboles alrededor, la comodidad del lobby y el bar, ms la hospitalidad del personal, son otros puntos a destacar. En alguna de las mesas podr acceder a un libro con mitos ese eja, textos acompaados de dibujos hechos por los nios del lugar, en cuyas pginas podr conocer la cosmovisin de este pueblo que, al fin y al cabo, fue uno de los primeros que domin estos parajes en armona con el resto de seres vivos. Un buen recuerdo que puede llevarse del paraso cuando haya que dejarlo.
DATOS Pasajes Lima-Puerto Maldonado-Lima: 90 dlares en promedio.
Estada de 3 das y 2 noches en Posada Amazonas: US$ 375 dlares (incluye actividades y buffet en desayuno, almuerzo y cena).
Para ver este y otros destinos tursticos, con operadores legales y seguros, visita ytuqueplanes.com, pgina de PromPer.