El número de aplicaciones populares disponibles para los dispositivos móviles de los niños y adolescentes se ha multiplicado en los últimos años. Las aplicaciones más versátiles permiten que los niños conversen informalmente con grupos selectos de amigos sin la limitación de espacio para textos y sin ser supervisados por los padres, tutores y maestros.
Muchas de las nuevas aplicaciones para móviles no requieren registrar un número de teléfono celular ni una tarjeta de crédito. Son gratuitas y pueden ser utilizadas en dispositivos portátiles populares como el iPod Touch y el Kindle Fire, siempre que haya una conexión inalámbrica de Internet.
Según el Centro Pew de Investigación de Internet y el American Life Project, más de tres cuartas partes de los adolescentes tienen un teléfono celular y usan sitios de redes sociales como Facebook. Pero tanto los educadores como los niños apuntan a numerosas evidencias anecdóticas para sugerir que el Facebook para los adolescentes ha pasado a ser un rito de iniciación necesario con numerosos espectadores adultos, mientras aplicaciones como Snapchat y Kik Messenger son mucho más atractivas para comunicarse con los amigos.
LA EDUCACIÓN SEXUAL EN EL CELULAR Algunos educadores dicen que han visto de todo: niños que usan sus dispositivos móviles para distribuir videos en línea de inspecciones escolares en busca de drogas hasta estudiantes varones que se intercambian fotografías de sus novias desnudas. Dicen que la mayoría de los padres no tiene idea de lo que ocurre.
Lo que antes era la educación sexual, ahora es la ‘conversación tecnológica’ la que debemos entablar con nuestros hijos, afirmó Rebecca Levey, madre de mellizas de 10 años que opera un portal de videos para preadolescentes llamado KidzVuz.com y blogs sobre cuestiones de tecnología y educación.
Eileen Patterson, madre de ocho hijos residente en Burke, Virginia, dijo que solía considerarse bastante familiarizada con la tecnología y está frecuentemente en Facebook, pero se asombró al enterarse de que sus hijos podían dialogar con sus amigos con un iPod Touch. Dice que hay nueve dispositivos inalámbricos en su hogar y se ha empeñado en desconectar el Wi-Fi de su hogar después de las 9 de la noche, pero considera que sus intentos por controlar la actividad en línea de sus hijos como una guerra que estoy perdiendo lentamente día a día.
PERDIENDO EL CONTROL He descubierto que suelo perder el control, agregó. Después veo algo en la televisión o leo un artículo en el periódico sobre algo horrible que le ha pasado a algún pobre niño o niña y su familia, y trato de estar más atenta. Pero la realidad es que soy estúpida en lo que respecta a los medios sociales.
Las aplicaciones móviles son los programas que pueden ser cargados en un dispositivo móvil por medio de un comercio en línea como Apple iTunes. Según la Comisión Federal de Comercio, hay unas 800.000 aplicaciones disponibles por medio de Apple y 700.000 por Google Play.
Entre las más populares entre los niños están Instagram, un programa gratuito que retoca fotografías digitalmente y las carga en la cuenta personal en línea. Las fotos pueden ser compartidas en otros medios sociales como Facebook, que adquirió Instagram el año pasado.
Y también está Snapchat entre las diez principales aplicaciones gratuitas para iPhone. Permite enviar texto, foto o video que se autodestruye a los diez segundos de ser abierto. Aunque quien recibe el mensaje puede aprovechar los diez segundos para capturar una foto y almacenar la imagen. Kik Messenger también permite textos ilimitados gratuitamente y ofrece anonimato a sus usuarios.