La sonda Curiosity de la NASA comenzó oficialmente su esperado viaje al Monte Sharp, una travesía que incluye rodar sobre algunos paisajes muy rocosos de Marte.
Desde el 4 de julio, el vehículo de seis ruedas se ha desplazado 58 metros (190 pies) hacia el suroeste, dejando atrás el sitio en el que se pasó los últimos siete meses realizando experimentos.
De ahora en adelante, el equipo está con una mentalidad de vamos, vamos, dijo Ashwin Vasavada, segundo al mando de la misión científica.
En el viaje, que se espera dure de nueve meses a un año, con escalas, la Curiosity recorrerá terreno no familiar. Con la ayuda de imágenes tomadas desde el espacio, los administradores de la misión trazaron una ruta recta en su mayor parte, sin demasiadas rocas, cuestas empinadas ni otros obstáculos.
Aun así, se espera que el terreno sea agreste, pero Curiosity fue diseñada para lidiar con eso, dijo Vasavada. Quizás la parte más difícil llegará hacia el final, cuando la sonda tendrá que cruzar un banco de dunas para llegar a la montaña.
TERRENO TOTALMENTE DESCONOCIDO Curiosity aterrizó en el cráter Gale cerca del ecuador marciano en agosto, con la mira en el Monte Sharp, de 4,8 kilómetros (tres millas) de altitud.
El vehículo, aproximadamente del tamaño de un automóvil, es la sonda más moderna enviada al planeta rojo y también la más costosa, de 2.500 millones de dólares.
En lugar de ir directamente hacia la montaña, los líderes del proyecto decidieron hacer una escala al este del sitio de aterrizaje para que la Curiosity pudiera perforar rocas.
El desvío resultó científicamente valioso: la sonda se topó con una cuenca ancestral y encontró rocas redondeadas por la fuerza de aguas que solían pasar por allí.
EN BUSCA DE VIDA Pese a que algunos experimentos tomaron más tiempo que lo que se esperaba, Curiosity ya alcanzó un requerimiento clave de la misión, al descubrir evidencia de un ambiente habitable en el que podrían sobrevivir microbios.
Los científicos han dicho que la sonda permanecerá fija en un sitio mientras siga haciendo descubrimientos. Pero con el aniversario del aterrizaje acercándose, hay presiones para que acuda a explorar las capas de rocas en la base de la montaña, en las cuales pudieran estar presentes las bases químicas que permiten la aparición de vida.
Realmente queremos llegar allí, dijo Vasavada. Probablemente Curiosity se desplazará al menos un mes antes de detenerse para perforar rocas. Durante el viaje tomará fotos de sus alrededores. Antes de cada partida, hay planes para abrir rocas con láser y medir los niveles de radiación.