El Departamento de Justicia norteamericano presentó hoy una serie de propuestas que limitarán el negocio con contenidos digitales de Apple en Estados Unidos después de que la empresa perdiera el juicio por acordar precios de e-books.

Entre otras cosas, Apple tendrá prohibido establecer ese tipo de acuerdos de precios con oferentes de e-books, música, películas y otros contenidos digitales, que pueden llevar a aumentos de precios entre comerciantes rivales. Además, Apple deberá permitir a las librerías competidoras como Amazon y Barnes Noble durante dos años colocar en sus apps un link directo a sus propias tiendas online.

Un tribunal deberá decidir ahora sobre estas propuestas. Apple, de todas formas, planea actuar contra el veredicto de principios de julio. El Departamento de Justicia y los fiscales de los estados norteamericanos acusaron a la empresa y a cinco editoriales de haber subido los precios de los libros digitales en Estados Unidos a través de acuerdos de precios ilegales durante el lanzamiento del iPad, hace tres años. Las editoriales llegaron a acuerdos con las autoridades. Apple, en cambio, siguió luchando, y perdió ante el tribunal.

Ahora el Departamento de Justicia quiere que finalicen los actuales acuerdos entre Apple y las librerías. Nuevos acuerdos mediante los cuales Apple no debería competir con otros por el precio le estarán vedados por cinco años. El tribunal convocará a un supervisor externo que deberá vigilar que se mantengan las reglas, pero su sueldo deberá ser pagado por Apple.

LA CONCERTACIÓN Cuando Apple lanzó al mercado el iPad en 2010, Amazon dominaba el negocio de los libros digitales. La mayor tienda online del mundo vendía bestsellers novedosos para lectores Kindle a un buen precio, de 9,99 dólares. Sin embargo, Amazon pagaba a las editoriales con la compra de cada libro algunos dólares de más por e-book, según se supo en el juicio. El sector editorial estaba descontento con esta política de Dumping de Amazon porque temía que acostumbrara a los lectores a precios inusualmente bajos.

Las editoriales vieron en el ingreso al mercado de Apple una oportunidad para construir un polo opositor a Amazon. Bajo la dirección del jefe de iTunes, Eddy Cue, y el fundador de la empresa, Steve Jobs, Apple acordó con las grandes editoriales estadounidenses un modelo de agencia, mediante el cual las editoriales fijaban el precio. Apple se aseguraba una comisión usualmente del 30%.

Además, había una cláusula que establecía que ningún otro comerciante podía obtener los precios a mejor precio que Apple. Con este medio de presión a mano, las editoriales pusieron un ultimátum a Amazon, según el tribunal: la tienda online debía sumarse al modelo de agencia o debía esperar más por los nuevos títulos. Amazon cedió: de acuerdo con la acusación, los precios aumentaron de 9,99 dólares a 12,99 e incluso 14,99 dólares.