Una técnica basada en el mismo tipo de tecnología que utilizan los escáneres de los aeropuertos reveló imágenes hasta ahora desconocidas detrás de un fresco del Museo del Louvre en París.
Las ondas terahertz son conocidas por su capacidad de penetrar en materiales sin dañarlos.
En los últimos años se han utilizado con frecuencia para examinar elementos de patrimonio cultural, junto con otras técnicas más comunes, como los rayos X, los ultravioletas y los infrarrojos.
Al aplicar la técnica sobre el fresco Trois Hommes Armes de Lances, del famoso coleccionista de arte del siglo XIX, Giampetro Campana, descubrieron una obra nunca antes vista que data de la época romana.
El hallazgo fue anunciado por Bianca Jackson, de la Universidad de Rochester en EE.UU., durante una reunión de la American Chemical Society.
TECNOLOGÍA SIN RIESGOS El uso de la luz terahertz –que se asemeja a la luz infrarroja utilizada en los controles remotos y a las microondas– se ha vuelto común en la tecnología de escaneo que emplean los aeropuertos y las salas de los museos.
Su gran atractivo radica en que permite extraer información sin correr el riesgo de deteriorar el objeto que se examina.
Es muy apreciada en los procesos de conservación de patrimonio cultural, ya que muchas otras técnicas, como los rayos X o los ultravioleta, pueden producir rupturas moleculares en los materiales, explicó Jackson en la reunión.
De modo que mientras examinamos una obra para determinar la mejor manera de conservarla, en realidad podemos estar contribuyendo a su deterioro.
El italiano Giampetro Campana fue uno de los coleccionistas más reconocidos del siglo XIX, y se especializaba en arte griego y romano.
Sin embargo, en sus últimos años decidió darle un giro a su carrera y se dedicó a la restauración –y posteriormente a la creación– de obras de estilo romano, pretendiendo que databan de esa época.
En estudios anteriores efectuados en la obra, los expertos utilizaron la fluorescencia de rayos X –que produce una lista de todos los átomos presentes en un objeto– y descubrieron que la técnica identificaba átomos que no estaban en la superficie.
BAJA CALIDAD Fue entonces cuando Jackson y sus colegas decidieron aplicar la técnica de radiación terahertz, con el fin de investigar lo que había detrás.
Al finalizar el escáner proseguimos con el procesamiento de datos, y logramos identificar lo que parece ser una figura humana detrás de la pintura Se pueden ver los ojos, las cejas, la nariz, la boca y la sombra de una barba, dijo.
El origen romano de la imagen aún está por comprobarse, pero en base a la historia del coleccionista, es probable que lo tenga. Lo más factible es que el artista haya considerado que la obra oculta era de baja calidad.
No es raro encontrar imágenes antiguas detrás de otras pinturas, ya que por el alto costo de los materiales o por simple conveniencia, muchos artistas pintaban sobre obras más viejas, o carentes de valor.
A veces es posible identificar las obras ocultas a simple vista, pero por lo general es necesario recurrir a técnicas avanzadas para detectarlas.
Si usted ve una moneda romana en venta en Ebay que data del año 200 aC por 25 centavos, es por una simple razón: no es de alta calidad, le dijo Jackson a la BBC.
Es lo mismo. Lo más probable es que el coleccionista haya pintado sobre la obra porque pensó que tendría más valor con un bonito cuadro encima.