Pese a que la policía le ha dado la razón, Google ya notificó que eliminarán su cuenta.
Pese a que la policía le ha dado la razón, Google ya notificó que eliminarán su cuenta.
/ Pixabay
Redacción EC

Un hombre de San Francisco, identificado solo como Mark, perdió toda su vida digital debido a bloqueó permanentemente su cuenta. ¿El motivo? Enviar unas fotos de las partes íntimas de su hijo al doctor, pues tenía una hinchazón que le causaba dolor. La policía le ha dado la razón, pero la empresa mantiene su decisión.

La esposa de Mark tomó el teléfono de su esposo y envió un mensaje de texto con algunos primeros planos de alta calidad del área de la ingle de su hijo a su iPhone para poder subirlos al sistema de mensajería del proveedor de atención médica. En uno, la mano de Mark era visible, lo que ayudaba a mostrar mejor la hinchazón”, recoge .

El problema inició en febrero de 2021, cuando aún muchos centros de salud no atendían completamente presencial debido a la pandemia por la COVID-19. “Con la ayuda de las fotos, el médico diagnosticó el problema y le recetó antibióticos, lo que lo solucionó rápidamente. Pero el episodio dejó a Mark con un problema mucho mayor, uno que le costaría más de una década de contactos, correos electrónicos y fotos, y lo convertiría en el objetivo de una investigación policial”, agrega el diario estadounidense.

El padre fue catalogado por el algoritmo de Google como “pedófilo”, debido a las fotos. “Mark, quien pidió ser identificado solo por su nombre por temor a un posible daño a su reputación, había sido atrapado en una red algorítmica diseñada para atrapar a las personas que intercambian material de abuso sexual infantil”, añade el medio.

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El padre perdió su vida digital debido a Google

Mark utilizaba los servicios de Google prácticamente para todo. Llevaba 10 años confiando en el gigante tecnológico y hasta ese momento no había tenido problemas. Sin embargo, tratar de ayudar a su hijo enfermo fue el punto de quiebre.

Incluso, la línea de su teléfono celular dependía de la compañía tecnológica. “Después de configurar una cuenta de Gmail en la mitad de su vida, Mark, quiene tiene 40 años, llegó a depender en gran medida de Google. Sincronizó citas con su esposa en Google Calendar. La cámara de su teléfono inteligente Android hizo una copia de seguridad de sus fotos y videos en la nube de Google. Incluso tenía un plan de teléfono con Google Fi”, afirma el diario.

Al recibir un mensaje, el padre se dio cuenta de lo que estaba pasando. “Dos días después de tomar las fotos de su hijo, el teléfono de Mark emitió un ruido de notificación: su cuenta había sido inhabilitada debido a ‘contenido dañino’ que era ‘una violación grave de las políticas de Google y podría ser ilegal’. Un enlace de ‘aprender más’ condujo a una lista de posibles razones, incluido ‘abuso y explotación sexual infantil’”, asegura el medio norteamericano.

Mark, quien trabajó como ingeniero de software para una herramienta automatizada de una empresa grande de tecnología y que consistía en eliminar contenido de video marcado por los usuarios como problemático, entendió lo que estaba ocurriendo. Por ello, pensó que todo se solucionaría al contactar con la persona de Google que supervisa esos sistemas.

Se contactó con Google a través de un formulario y explicó lo sucedido, pero entonces descubrió el efectó dominó del bloqueo en su cuenta: perdió sus correos, contactos, información guardada en la cuenta, los primeros años de vida de su hijo y también tuvo que comprar un nuevo número de celular con otra empresa. Además, debido a que no podía usar su celular, no podía acceder a cualquier otra cuenta, pues le pedía que ese número y esa cuenta de Google le diera el permiso.

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La policía investigó a Mark porque Google lo reportó

La empresa denunció a Mark en el organismo Explotación Sexual de Niñas, Niños y Adolescentes (NCMEC, siglas de National Center for Missing & Exploited Children) debido a las fotos de su hijo enfermo. Esto llevó a que la Policía de San Francisco investigara al padre.

En diciembre de 2021, Mark recibió un sobre manila por correo del Departamento de Policía de San Francisco. Contenía una carta en la que se le informaba que había sido investigado, así como copias de las órdenes de allanamiento enviadas a Google y a su proveedor de servicios de Internet”, afirma el medio.

La policía ingresó a toda la información de la cuenta de Mark.“Un investigador, cuya información de contacto se le proporcionó, había pedido todo en la cuenta de Google de Mark: sus búsquedas en Internet, su historial de ubicación, sus mensajes y cualquier documento, foto y video que hubiera almacenado con la empresa. La búsqueda, relacionada con ‘videos de explotación infantil’, había tenido lugar en febrero, una semana después de que tomó las fotos de su hijo”, agrega el diario.

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Mark contactó con el investigador, Nicholas Hillard, quien le dio la razón y había dado por concluida la investigación. Incluso este último trató de comunicarse con el padre, pero debido a que su número de celular y todas sus cuentas estaban “bloqueadas”, además de la situación con la pandemia, hicieron casi imposible que se contactara directamente en aquel momento.

Determiné que el incidente no cumplió con los elementos de un delito y que no ocurrió ningún delito”, fue lo que escribió Hillard en su reporte, tras investigar toda la información de la cuenta de Google de Mark, quien pidió que intercedan por él ante Google. Sin embargo, el investigador le dijo que no podía hacer más.

El padre incluso pensó en demandar a Google, pero le costaría mucho simplemente intentarlo. “Mark volvió a apelar su caso a Google y proporcionó el informe policial, pero fue en vano. Después de recibir un aviso hace dos meses de que su cuenta se eliminaría de forma permanente, Mark habló con un abogado sobre demandar a Google y cuánto podría costar. ‘Decidí que probablemente no valía US$7.000′”, añade el periódico estadounidense.

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