(Foto: LIGO)
(Foto: LIGO)
Redacción EC

Los científicos del Observatorio de Ondas Gravitacionales por Interferometría Láser (LIGO), en Estados Unidos, y de Virgo, en Italia, detectaron las primeras huellas de un devorando una estrella de neutrones, un fenómeno nunca antes visto, según dio a conocer . De confirmarse, sería la primera detección en toda la historia de estos sistemas binarios.

Los científicos responsables de este avance son los mismo que en 2015 lograron la primera detección directa de las ondas gravitacionales, que ha permitido observar la fusión de parejas de agujeros negros y de estrellas de neutrones.

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El anuncio se realiza luego de que LIGO diera a conocer el segundo evento de fusión de estrellas de neutrones, lo cual se suma a la posible detección de 14 posibles eventos de fusión de parejas de agujeros negros.

Los observatorios LIGO y Virgo captaron una inusual señal de ondas gravitacionales el pasado 26 de abril. Según los investigadores, la detección de este evento nunca antes registrado ayudaría a poner a prueba las predicciones de la Relatividad General de Einstein.

"Creo que la clasificación (de los datos) se está inclinando por la fusión de una estrella de neutrones y de un agujero negro", dijo a Nature Chad Hanna, miembro de LIGO.

B. S. Sathyaprakash, teórico de LIGO, afirmó que este fenómeno además le permitirá observar las etapas finales del fenómeno, cuando el agujero negro desgarra el interior de la estrella de neutrones. Esto ayudará a conocer en qué estado se encuentra la materia en estos objetos ultracompactos, un misterio que ha inquietado a los astrónomos desde hace décadas.

Tras el anuncio, cientos de astrónomos de todo el mundo barren el cielo para poder observar la fusión y comprobar de manera independiente lo que sería un inédito fenómeno, que también ayudaría a poder hacer nuevas mediciones de sobre la tasa de expansión del Universo.

Por el momento, se conoce que la posible fusión del agujero negro y una estrella de neutrones, que ha sido nombrado #S190426c, se encuentra a una distancia de 1.200 millones de años luz de la Tierra.

Las ondas gravitacionales son distorsiones del espacio-tiempo, como ondulaciones cuando se suelta un objeto en el agua. Estas recorren el Universo a la velocidad de la luz y se producen cuando objetos supermasivos se mueven a altísimas velocidades.

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