La ceniza y piedras volcánicas arrojadas por el volcán Agung en Bali, Indonesia, están formando "lahars" o ríos de lava fría.
Mezclados con la lluvia, estos flujos de lodo pueden crear peligrosas corrientes rápidas, por lo que las autoridades de Indonesia advirtieron a la población que se mantenga alejada.
Miles de personas fueron evacuadas en la turística isla de Bali y su único aeropuerto fue cerrado.
Las autoridades creen que el volcán Monte Agung "podría lanzar una erupción en gran escala".
Contenido sugerido
Contenido GEC