Tomás Unger Golsztyn

Alrededor del mundo se han notado mejoras del medio ambiente urbano gracias a la cuarentena. Yo tengo la mala suerte de vivir en una calle residencial paralela a la avenida Benavides que es usada como atajo. La ventana de mi escritorio da a la calle, donde hay una fila continua de autos desde las 7:30 a.m. hasta las 8:00 p.m., a veces detenida por varios minutos.