Con o sin pasta dental, el cepillo de dientes debemos usarlo correctamente por lo menos tres veces al día, según los especialistas. (Foto: )
Con o sin pasta dental, el cepillo de dientes debemos usarlo correctamente por lo menos tres veces al día, según los especialistas. (Foto: )
Bruno Ortiz Bisso

El es una actividad relacionada con el aseo personal que se adopta desde la aparición de los dientes en la persona. Aunque todos sabemos que la recomendación principal es cepillarse después de cada comida, muchas veces por el apuro o la rutina no realizamos una correcta limpieza de los dientes, lo que a la larga podría afectar nuestra salud.

A continuación repasaremos las principales recomendaciones para tener una dentadura saludable y mejorar nuestros hábitos de limpieza.

1. Hay que cepillarse los dientes, por lo menos, tres veces al día. Se debe ser cuidadoso en la noche.
La recomendación es cepillarse después de cada comida, pero como es complicado, los especialistas coinciden en que lo óptimo es hacerlo tres veces al día. Según el University College de Londres, no es recomendable el inmediatamente después de comer porque se corre el riesgo de frotar el ácido restante de la comida contra nuestros dientes. Lo ideal es esperar media hora después de comer. 

“Lo mínimo que nos deberíamos demorar en cepillarnos son cinco minutos. Esas pasadas rápidas del no sirven. Si vamos a cepillarnos como debemos, nos vamos a demorar. Por ello, es mejor que esa limpieza más a fondo la realicemos en la noche y así nos aseguramos de ir a la cama con la boca limpia y mejor protegida ante las bacterias”, explica el doctor Guillermo Ríos, director de la Estética Dental Ríos.

Es necesario colocar el cepillo de dientes en un ángulo de 45 grados para no solo limpiar las encías, sino masajearlas y complementar así la limpieza. (Foto: AP)
Es necesario colocar el cepillo de dientes en un ángulo de 45 grados para no solo limpiar las encías, sino masajearlas y complementar así la limpieza. (Foto: AP)

2. Los dientes se deben cepillar en grupos de tres y en un ángulo de 45 grados.
En cuanto a la técnica del cepillado hay muchos mitos: hacer movimientos cortos de adelante hacia atrás; aplicar mayor presión porque un fuerte asegura una mayor limpieza; incluso que si hay sangrado de encías, es normal. “Para una adecuada limpieza de los dientes es mejor agruparlos de a tres para cepillarlos”, explica Ríos. 

Se puede empezar desde el incisivo central, el lateral y el canino, para que el proceso sea más sencillo. El se debe usar en un ángulo de 45 grados, para que las cerdas del cepillo que están más arriba puedan entrar entre la encía y el diente, que es donde se acumula la placa bacteriana. 

“Ese ángulo se usa para la cara vestibular, que es la que se ve al sonreír; la cara palatino-lingual, que es la interna; y la cara oclusal, que es la de la masticación. La idea es llegar a todas esas caras para que los restos de carbohidratos y microorganismos no se queden en los dientes”, recomienda el especialista. El no se debe realizar con tanta fuerza, porque se corre el riesgo de lastimar las encías o crear un afta. Con respecto al sangrado de las encías durante el cepillado, no es normal que suceda. Esto pasa cuando el paciente sufre de gingivitis o periodontitis. 

3. El cepillo se debe acondicionar al tamaño de los dientes y cambiar cada dos meses.
Si la recomendación es cepillarse agrupando los dientes de a tres, hay que pensar en el tamaño del para tener una limpieza más efectiva. “No todos los cepillos son iguales para todos los pacientes. La recomendación es que se visite al odontólogo y este le acondicione el cepillo al tamaño de sus dientes. La idea es que con esta herramienta lista para nuestra dentadura podamos hacer una mejor limpieza”, señala el dentista. 

Asimismo, el se debe cambiar cada dos o tres meses, porque después las cerdas se van desgastando y dejan de ser eficientes. Los cepillos de marca conocida y mejor fabricación son una buena opción.

4. La pasta dental no es imprescindible, el hilo dental es básico, y hay que tener cuidado con los enjuagues.
“La pasta dental cuenta con muchos ingredientes que van a ayudar con la limpieza y van a dar un buen sabor, pero lo recomendable es que, así no haya pasta, hay que cepillarse los dientes. El masaje que se les hace a los dientes y a las encías es lo más importante”, explica el doctor Guillermo Ríos. 

El uso del hilo dental es muy recomendable como complemento porque permite llegar a zonas donde no se llegó con el . “Si después de usar el hilo dental y haberse cepillado, siente que faltó limpiar más, puede volver a usar el hilo”, detalla Ríos. 

Con respecto a los enjuagues, todo depende de la salud del paciente. “Cuando tú estás con una boca sana, con una buena higiene y los dientes limpios, se pueden usar tres veces a la semana. El riesgo de usarlos todos los días es que se pueden convertir en abrasivos y lastimar los dientes. Si hay un problema periodontal y lo recomienda el odontólogo, ahí sí. Por eso existen los de tratamiento y los de mantenimiento”, concluye Ríos. 

El cepillo de dientes eléctrico puede ser una buena alternativa sobre todo por el movimiento constante de sus cerdas. (Foto: Reuters)
El cepillo de dientes eléctrico puede ser una buena alternativa sobre todo por el movimiento constante de sus cerdas. (Foto: Reuters)

LA CIFRA
En promedio, el 20% de adultos en el mundo sufre de enfermedades periodontales graves, que desembocan en pérdidas de dientes, según la OMS.

Más datos
El cepillo eléctrico. Suele ser más efectivo, pues se mueve en tres direcciones distintas. Sin embargo, debe emplearse adecuadamente para realizar la limpieza de forma correcta.
Fosas y fisuras. Si su dentadura presenta fosas y fisuras profundas, deberá usar sellantes o flúor, dependiendo de la edad.

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