BETTY SOTO

Jessica Tapia dejará la televisión local por el matrimonio. En menos de una semana, estará casada con el estadounidense Steven Dykeman y, en pocos meses, residirá en Chicago, un cambio radical del que habla con soltura en esta entrevista. Además, hace un repaso de su vida.

¿Te vas de la televisión porque te ha llegado a cansar? Para nada. Solo ha llegado el momento de preocuparme por mí. Tengo una carrera consolidada en la TV, una linda familia, pero acabo de encontrar al hombre ideal y da la casualidad de que es extranjero, así que corresponde marcharme con él.

¿Sientes que habías descuidado tu vida personal? Sucede que llegó mi momento. Como todos, tuve relaciones que me hicieron muy feliz, pero que luego se desgastaron, se rompieron. Nunca antes me sentí completamente satisfecha como para dar un paso tan importante como el matrimonio.

¿Antes no pensaste en casarte? Lo sentí con alguna de mis parejas anteriores, pero con el tiempo la idea se diluyó. Con Steve pasa todo lo contrario, a su lado me siento segura y sana. Mis padres han estado casados por 40 años y por eso pienso que el matrimonio es para siempre. No creo en el divorcio.

¿Podrás vivir como una auténtica ama de casa? Sí, porque no creo en el rollo de que una mujer deba trabajar siempre fuera de casa y a su vez hacer los quehaceres del hogar para demostrar que vale. Mi desarrollo laboral llegó hasta acá. Ahora mi familia será mi prioridad.

¿Vivirías sin hacer televisión? ¿Por qué no? No creo que la TV sea adictiva, como muchos dicen. Para mí es una profesión, algo que me formó, me dio oportunidades, pero que también podría dejar por otra cosa. En este caso, mi matrimonio.

¿Qué te preocupa de tu futura estancia en EE. UU.? Quizás el proceso de adaptación. Quiero formar una familia, tener dos hijos y entregarme por completo a ellos. Quiero encajar, hacer las cosas bien y tener al marido contento.

Lee la entrevista completa en la edición de hoy de Luces.