Redacción EC

“Honestamente no creo que para estar en TV el físico sea lo más importante, hace falta más que eso: estar informada, tener empatía con el televidente…, son varios factores, parece simple, pero no es así”.  A inicios de 2013,  la periodista ingresó a la edición del mediodía de América Noticias en reemplazo de . Entre sus pretensiones estaba el de mantener al noticiero como líder en su horario y demostrar que es mucho más que un rostro bonito. Un año después, los resultados de audiencia la respaldan.

 “América Noticias: Edición Mediodía” se ha consolidado en su horario. ¿A qué atribuyes eso?

Al trabajo en conjunto, a un equipo que se esfuerza mucho por sacar un buen programa al aire, y ya estando un año ahí, me siento mucho más parte del grupo y muy gratificada por la respuesta del público.

Mucha gente aún piensa que para ser presentadora de noticias solo se necesita ser bonita. ¿Es así?

Definitivamente no. Es importante el físico en el sentido que tienes que registrar bien en pantalla, pero el tema va más allá. Tienes que estar informada y tener empatía con el televidente. Cuando en un noticiero hay varias microondas a la vez y recibes información de todas partes, tienes que demostrar que no pasa nada, que todo está bien. No es fácil. Sin embargo, es una crítica válida porque en algún momento, hace varias décadas atrás, fue así. En ese entonces, la evaluación más importante para las presentadoras de noticias era el cásting visual. 

El horario del mediodía está cada vez más competitivo. ¿Cómo afrontas la competencia?

La competencia no es un problema para mí, porque solo te puede hacer mejorar. Cuando sientes que hay realmente otros proyectos igual de buenos o mucho mejores que los tuyos te esfuerzas por armar un equipo más consolidado, por tener una agenda mediática mucho más interesante. Si hay algo que hemos integrado al noticiero del mediodía es más información para las amas de casa, información médica, loncheras saludables, temas para toda la familia. Así, solo nos puede ir mejor.  

¿Qué diferencia encuentras entre hacer periodismo en cable y la señal abierta?

Un canal de cable te da la licencia de ahondar mucho más en la noticia, en televisión abierta los tiempos son más pauteados, tienes entrevistas mucho más pauteadas y brindas información más variada. En cable hay más entrevistas, es más político.

Luego de tu comentada salida de TV Perú estuviste varios años alejada de la TV. ¿Te costó volver?

De alguna manera seguía involucrada a este mundo porque, por lo general, mis trabajos en TV los he llevado paralelamente a otros trabajos como comunicadora. He sido redactora, cronista, también hago asesorías de prensa. Por fortuna se dio la posibilidad de volver y aquí estoy.

¿Qué satisfacciones te ha dado esta carrera?

Muchas. Sobre todo la satisfacción de poder ayudar. Cuando una madre te busca porque a su hijo que está en el hospital no lo quieren transferir a otra unidad. Haces la denuncia y los médicos se interesan. También es bonito cuando alguien te espera afuera del canal solo para darte un abrazo, como si te conociera de toda la vida. Y eso solo te puede dar la televisión.

También te convierte en un personaje público y de alguna manera te hace perder privacidad.

Pero es algo que no me preocupa, yo soy muy querendona, me encanta sentir el cariño y reconocimiento de la gente.

¿Hacer periodismo afuera está en tus pendientes?

De momento no, porque tendría que radicar afuera, pero sí me gustaría viajar. Sin embargo, sí tengo un tema pendiente conmigo misma que siempre postergué: hacer una maestría en el extranjero.

Acabas de incursionar en el mundo de la moda, con una marca de ropa española. ¿Cómo se dio?

Es verdad, he incursionado en el mundo de la moda, pero no directamente. La marca Desigual, que tiene participación en el mundo entero, llegará al Perú y me eligió como su embajadora. Tiene dos embajadoras en Latinoamérica: una en Brasil y otra yo.

¿En el tema personal te va tan bien como en el laboral?

Me va muy bien, estoy súper contenta, con pareja, tenemos un par de años juntos y ya estamos conviviendo. No es peruano, es español, es un encanto, es como el complemento perfecto. Creo que cuando te sientes muy contenta y completa en lo personal, todo lo demás empieza a fluir. Estoy viviendo mi mejor momento.

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