Los principales destinos turísticos de Europa siempre serán sus grandes e históricos monumentos y edificaciones. El gran Coliseo de Roma o la Abadía de Westminster en Inglaterra no dejarán de atraer a miles de turistas cada año.
Sin embargo, no todos los lugares históricos europeos captan la atención que tienen la Acrópolis de Grecia o el Arco del Triunfo de Francia. Europa Nostra, un grupo dedicado a la preservación de los monumentos europeos, lanzó una lista de lugares históricos en riesgo de desaparecer. Entre ellos, algunas iglesias, monasterios, fortificaciones militares e incluso una ciudad entera.
Con este nuevo programa de apoyo, Europa Nostra tiene como objetivo no solo identificar los monumentos y sitios más amenazados en Europa, sino también poner en marcha un verdadero llamado a la acción. Mediante el envío de equipos multidisciplinarios de expertos a visitar los sitios seleccionados, junto con nuestros socios, vamos a tratar de contribuir a la búsqueda de soluciones sostenibles y viables para el futuro”, dijo Denis de Kergorlay, presidente ejecutivo del grupo activista.
En esta lista se han incluido 14 sitios de 21 países, de un total de 40 propuestas. Sin embargo, solo siete serán seleccionados para recibir los equipos de expertos y especialistas financieros para elaborar planes de acción. Luego, los equipos de expertos se reunirán en Bruselas para compartir sus resultados en la Conferencia de Política Patrimonial Europea.
La lista de lugares históricos en riesgo incluye:
El Anfiteatro Romano en Durres, Albania Este magnífico anfiteatro del siglo II a.C. fue redescubierto en la década de 1960, poniendo la antigua ciudad de Durres de nuevo en el mapa de los sitios históricos de Europa. El problema es que ha sido gravemente dañado por los terremotos, y es un reto integrarlo con el crecimiento urbano de Durrës, que podría superar al sitio histórico.
Iglesia de San Pablo y San Pedro, Aragatsotn, Armenia Es una de las estructuras cristianas más antiguas, que data del siglo V. Las regulares inundaciones la han puesto en serio peligro, y su situación de alarma requiere una acción urgente de expertos y ayuda internacional.
Las Murallas del Centro Histórico de Nicosia, Chipre Esta edificación medieval fue levantada por los venecianos, y ha servido para que las comunidades greco-chipriota y turco-chipriota limen asperezas por la recuperación del corredor de 1,5 kilómeotrs, con ayuda de la ONU.
Fortificaciones de Vauban en Briançon, Francia Diseñada en el siglo XVII para proteger la ciudad, esta obra maestra necesita ser protegida del deterioro y tener un uso viable. Debido a su tamaño e importancia ha sido reconocida por la UNESCO, y las comunidades locales, nacionales e internacionales han sido llamadas para preservarla.
Las Lámparas de Gas de Berlín, Alemania Estas farolas de gran valor histórico continúan en perfecto funcionamiento, y han sido parte del paisaje urbano de Berlín durante casi 200 años. Hoy en día no hay otra ciudad en el mundo que conserve las luces de gas a una escala tan grande que da un carácter único, con un toque romántico, a las calles de Berlín. La comunidad local y los visitantes se oponen a la propuesta de sustituir las luces de gas por lámparas eléctricas.
El Palacio Real de Tatoi, cerca de Atenas, Grecia A pesar de su situación, esta gran casa, convertida en propiedad real por el rey Jorge I en 1872, combina la historia, la arquitectura y la naturaleza de Grecia. Situado en las cercanías de Atenas, puede ser vuelto a su gloria para el disfrute de los turistas. El apoyo de locales y turistas es fuerte, pero es necesario el compromiso de los sectores públicos y privados para la recuperación de la finca.
Ciudadela de Alessandría, Italia Es una de las más grandes fortificaciones militares de la Europa del siglo XVIII, con una rica historia vinculada a la época napoleónica y la unificación de Italia. Su restauración es un gran reto, tanto en términos financieros como técnicos.
Monasterio de San Benedetto Po, cerca de Mantova, Italia Este monasterio, que data de los siglos XV- XVI, fue gravemente dañado por el terremoto de mayo de 2012. Su conservación es necesaria, debido a la importancia histórica y artística del edificio renacentista, y su impacto turístico.
Iglesia del antiguo convento de Jesús en Setúbal, Portugal Reconocido como Monumento Nacional, destaca su estilo manuelo. Fue escenario de la firma del Tratado de Tordesillas en 1494 entre España y Portugal, y ahora se encuentra en un grave y rápido deterioro.
Paisaje minero de Rosia Montana en Transilvania, Rumania Tres milenios de actividad minera han formado paisaje minero de Rosia Montana y los pueblos cercanos en lo que son hoy. Sin embargo, el actual proyecto de minería de oro a cielo abierto pondría en peligro seriamente su patrimonio y el medio ambiente.
Sitio Arqueológico de Vinca-Belo Brdo, cerca de Belgrado, Serbia Este yacimiento del periodo neolítico está altamente amenazado por la falta de recursos para las excavaciones científicas y por su proximidad a la orilla del río del Danubio. Una vez recuperada, podría ser una atracción turística del valle del Danubio.
Barrio de El Cabanyal-Canyamelar en Valencia, España Los habitantes están divididos en el proyecto para la construcción de una carretera que pondría en riesgo las tradicionales fachadas del histórico barrio marinero. Quienes se oponen, creen que se debe preservar el paisaje urbano para las generaciones futuras, y explotar las oportunidades de inversión y desarrollo sostenible.
Iglesia Armenia de San Jorge en Mardin, Turquía Ahora, una iglesia abandonada, este monumento se remonta al siglo V, y sirvió a la gran población de Armenia hasta el comienzo del siglo XX. Esta herencia histórica representa los esfuerzos de Turquía para preservar la historia multicultural de Turquía.
La histórica ciudad de Hasankeyf, Turquía Declarada Área de Conservación Natural por parte de Turquía en 1981, la ciudad es un registro vivo de las múltiples facetas culturales de la historia humana en Europa y Asia, y alberga una gran cantidad de restos arqueológicos. Actualmente se encuentra amenazada por la construcción de una presa hidroeléctrica que, de concretarse, inundaría el 80 % de los monumentos de Hasankeyf en la próxima década.