El 13 de marzo se inició el festival de Holi, celebración en la que las calles de la India, Guyana y Nepal se llenan de colores para celebrar la llegada de la primavera.
Batallas con pinturas, polvos de diferentes colores y variada música son los grandes protagonistas de esta celebración hinduista que se ha vuelto muy popular no solo en Asia, sino también en diversas partes de Europa y Norteamérica.
Los orígenes del Holi, también conocido como el Festival de los Colores, se remontan a diferentes leyendas mitológicas hindúes, pero esta no es excusa para que los no creyentes o turistas sean parte de la colorida fiesta que tiene como fin ahuyentar a los malos espíritus y empezar con el pie derecho la primavera.