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Saborea Cartagena: Ciudad que enamora por su espíritu bohemio - 1
Redacción EC

Milagros Vera Colens

La historia cuenta que alrededor de seis millones de esclavos negros llegaron a Cartagena de Indias durante la Colonia. Ellos se encargaron de construir los 11 kilómetros de murallas, que hasta hoy se aprecian para proteger la ciudad de piratas e invasores ingleses.  Pero no solo eso: además, transmitieron su alegría y buena sazón a la localidad.

Sus descendientes habitan el pueblo San Basilio de Palenque, a más de una hora del Centro Histórico, de donde provienen las famosas ‘palenqueras’, mujeres que venden frutas que las llevan en un bandeja sobre la cabeza, haciendo gala de gran equilibrio.

De sus manos nacieron recetas como la posta cartagenera, elaborada con un corte de carne llamado punta de anca, macerado con tamarindo y servido con arroz de coco; el mole de queso, que es una sopa blanca con queso criollo, y el dulce de plátano.

LA BUENA MESA

El propietario del restaurante El Santísimo, Francisco Vélez, cuenta que hasta hace unos 30 años solo había dos bares y un restaurante en todo Cartagena. Pero esto cambió con la llegada del turismo y la evolución de la gastronomía, que introdujo productos locales y técnicas autóctonas a la cocina.

Su restaurante es uno de los mejores exponentes de la comida típica cartagenera. Todos sus platillos hacen referencia a la religión, como los pañuelos de la novicia, una entrada de queso apanado y frito, o la Santísima Trinidad, una bandeja con salpicón de pescado, langostinos y plátanos en tentación.

El restaurante Candé también tiene lo suyo. Entre sus especialidades están las sopas con plátano verde o queso criollo y los sancochos de gallina o mariscos.

Otro palacio de la cocina es Juan del Mal, que funciona en una casa republicana del siglo XIX, en la famosa plaza de San Diego. Su carta está colmada de pescados, cangrejos y calamares mezclados con productos caribeños, como el ají cartagenero y algunos secretos del autor.

Algo más informal es el restaurante Collage Charladero, en el que puedes comer un sánguche costeño (carne cocida con patacones) que combina perfecto con un refresco de corozo (fruto cítrico). Y para quienes gustan de comer al paso están los tradicionales fritos, como la arepa rellena de huevo y picadillo de cerdo en los alrededores de las plazas. Y para ver el ‘sunset’ la mejor vista es la de Café del Mar, un bar ubicado en una explanada de la muralla. 

SALSA Y ALGO MÁS

Las noches tienen un suculento sabor a salsa y vallenato. El ícono salsero de Cartagena es Donde Fidel, un bar situado en la Plaza de los Coches. Además está el Café Havana, en el barrio de Getsemaní. 

En el Bazurto Social Club se baila champeta, mezcla de música africana, reggae y reggaetón, que ha pegado con fuerza. Y para prolongar la fiesta está Mr. Babilla, con los mejores vallenatos y ritmos de moda .

GUIA DEL VIAJERO

Cómo llegar
Vía aérea: Para llegar a Cartagena desde Lima hay que hacer conexión vía Bogotá. Avianca y Copa. (/ )

Dónde comer
El Santísimo: Cocina tradicional. Precio promedio: US$20.
Candé: Cocina tradicional. Precio promedio: US$20.
Juan del Mar: Especialidades marinas. Precio promedio: US$20.
Collage Charladero: Calle Román 5-47, Cartagena. Precio promedio: US$10.
Café del Mar: Cocteles y piqueos. Precio promedio: US$20.

Dónde dormir:

Hotel Santa Clara: Desde US$350.
Hotel Casa San Agustín: Desde US$380.
Hotel Royal Puerta del Reloj: Desde US$150.

Vida nocturna:

Donde Fidel: Plaza de los Coches. Precio promedio: US$5.
Café Havana: Precio promedio: US$10.
Bazurto Social Club: Precio promedio: US$8.
Mister Babilla: Precio promedio: US$20.

Islas del Rosario
Recomendamos visitar alguna de las 27 islas que forman parte del archipiélago Islas del Rosario.  La excursión cuesta US$50 en promedio e incluyen el traslado en lancha y el almuerzo. Las embarcaciones se toman en el muelle de la Bodeguita y el viaje tarda una hora. Adicionalmente se paga un impuesto de US$6. Se puede ir al acuario por US$10, practicar esnórquel por US$20 y bucear por US$70 extra.

Íconos turísticos
El Castillo de San Felipe de Barajas fue un fuerte que sirvió para defender la ciudad de piratas y corsarios. En la actualidad es uno de los atractivos más visitados de Cartagena, gracias a las imponentes vistas que ofrece y a sus torreones y cañones en buen estado de conservación. El ingreso cuesta US$10. Detrás del fuerte encontrará la escultura de los zapatos viejos, que es un ícono muy buscado por los turistas.

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