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Ruta del pisco
Alejandro Salas

Al igual que Ica y Moquegua, y sin nada que envidiarles, la tiene su propia ruta pisquera. En total, 22 bodegas forman parte del recorrido. Ser testigo del proceso de producción de nuestra bebida bandera toma entre uno a tres días, ya que puedes ir por el norte y cruzar los valles de Camaná y Caravelí; por el centro, a través del valle de Majes; o por el sur, y descubrir los valles de La Joya, Santa Rita de Siguas y Vítor. 

En cada uno de estos puntos aprenderás sobre las distintas variedades de uvas que se utilizan para el emblemático destilado: negra criolla, italia, moscatel, torontel, quebranta y mollar. Aconsejamos iniciar la travesía por el circuito del sur, pues está a una hora y media del Centro Histórico de Arequipa. El más lejano, en cambio, es el norteño, que se halla a ocho horas en auto.

Múltiples opciones

Si crees que esta experiencia se limita a la teoría te equivocas, porque activa todos tus sentidos gracias a la exquisita mezcla de sabores y aromas. Los tours del pisco han sido diseñados para distintos gustos y bolsillos. En el más corto (un día) irás mínimo a dos de las bodegas más emblemáticas del valle de Majes, situado a 120 km de Arequipa.

Apreciarás las tinajas de fermentación de más de 300 años de antigüedad y, después, te llevarán a los Petroglifos de Toro Muerto. Esta zona arqueológica comprende 5 km² y pertenece a la provincia de Castilla, donde el arte rupestre destaca en piedras talladas con figuras antropomórficas y geométricas.

Por otro lado, la ruta más larga (tres días, en el mismo valle) la integran seis bodegas. Además de brindar con piscos de hasta diez años de añejos, te enseñarán cómo se llega al paso final del envasado. Este circuito hace una parada en el cerro Querullpa, a 20 minutos de Toro Muerto. Aunque suene increíble, allí se exhiben pisadas de los dinosaurios que habitaron la zona. Ambas excursiones parten a las 7 a.m. e incluyen movilidad (desde y hacia el hotel), guiado y snacks. La primera cuesta S/270 por persona; la segunda, S/780 por persona.

Los dueños de dos de las bodegas más antiguas de la región, El Socabón (pisco Casta de León) y Luque Vázquez (pisco Toro Muerto), te harán sentir como en casa. Pero no solo eso, te sorprenderá que el trabajo artesanal no se haya perdido al obtener sus finas marcas, y te toparás con recipientes de barro que se resisten al paso del tiempo y complementan el ritual de destilación y reposo del mosto verde.

Para iniciar con pie derecho la cata y la aventura por la Ciudad Blanca, prueba el pisco acholado. “Este encuentra el perfecto equilibrio entre las uvas negra criolla, quebranta, moscatel, torontel e italia”, afirma Denis Pinto, propietario de El Socabón. Otro destino clave en el valle de Majes es Viña del Ocho (pisco Majes Tradición), finca que desde 1775 ha visto pasar 10 generaciones y mantenido intacta la calidad y pureza de sus piscos. Durante el guiado, disfruta de sus mejores exponentes: mollar y quebranta y de sus aromas a frutas (manzana, durazno) y miel.

El dato: el cuarto domingo de julio es el día nacional del pisco. ¡Festéjalo en Arequipa!

GUÍA DEL VIAJERO
​¿Cómo llegar?

Viaja a Arequipa en Peruvian Airlines desde US$80. Si prefieres la vía terrestre (17 horas), los pasajes en Civa están desde S/50.

¿Dónde alojarte?
La habitación superior matrimonial del hotel Casa Andina cuesta US$90, mientras que una doble o matrimonial en la Casona Plaza Hotel Arequipa vale S/240 (incluye desayuno).

¿Dónde comer?
La Nueva Palomino. Prueba su ocopa (hecha en batán) y acompáñala con chicha de jora de guiñapo. Precio promedio: S/60.

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