La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), en la que participará el papa Francisco la próxima semana en Río de Janeiro, provocará que entre 1,7 y 2 millones de turistas lleguen la ciudad, indicaron las autoridades brasileñas. Se estima que el 40% de los visitantes serán extranjeros.

Asimismo, el acontecimiento inyectará 1.200 millones de reales (unos 539 millones de dólares) en la economía de Brasil, según dijo hoy el secretario interino de Turismo del país, Sandro Fernandes.

Solo en hospedaje y alimentación el gasto sumará 660 millones de reales (más de 295 millones de dólares).

Fernandes hizo estas declaraciones en Río de Janeiro, donde las autoridades del Gobierno central revelaron detalles del dispositivo de salud y movilidad montado para la JMJ.

El secretario de Aviación Civil, Rafael Faria, explicó que un centro de comando y control central coordinará el movimiento de los aeropuertos, y que las autoridades cuentan con un plan específico de trabajo para las instalaciones aéreas de Río y Sao Paulo y otras 19 por todo el país.

Igualmente, Faria indicó que se ha aumentado el número de cabinas de inmigración para agilizar la entrada de los peregrinos al país.