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Cerca de 100 mil extranjeros realizan turismo rural en Perú
Redacción EC

Andrés Velarde

Aquí no solo le abren las puertas de la casa a los visitantes. Todo el pueblo participa de la bienvenida. En Sibayo la población está dispuesta a ofrecer su techo, invitar su comida, participar de sus actividades, mostrar sus tradiciones y compartir su estilo de vida con los turistas, para que los que lleguen a esta comunidad altoandina sean testigos de la belleza de esta parte del país.

Desde hace algunos años, los pobladores de este lugar decidieron convertir al turismo en uno de sus cuatro ejes de desarrollo; además de la ganadería de auquénidos, el arte textil y la pesca y cultivo de truchas. Gracias al programa De mi Tierra, un Producto, el pueblo entero se puso a punto para recibir al turismo. Sus calles fueron ordenadas, embellecidas y correctamente señalizadas; el templo cristiano del siglo XVII, con sus coloridos retablos y altar fue puesto en valor; la plaza de armas fue modernizada y se agregaron una pileta y algunas estatuas que representan la principal actividad del lugar, el pastoreo de alpacas.

VIVIR COMO SIBAYEÑO

Todos los visitantes son huéspedes, y todos los lugareños, anfitriones. Doce familias han preparado las habitaciones de sus casas para recibir a los turistas, y brindarles alojamiento y alimentación.

Las habitaciones son amplias y gozan de muchas comodidades imprescindibles para los foráneos, como estufas y gruesas mantas para combatir el intenso frío, así como baños equipados con agua caliente, gracias a las termas solares instaladas en cada una de las casas. Solo el hospedaje cuesta S/. 25 por noche.

Aquí se puede compartir el día a día con los locales, participar en paseos para pastorear al ganado y recoger leña, visitar el puente colgante y pescar truchas y ver cómo confeccionan ropa en el centro textil de Away Wasi. De seguro se animará a adquirir alguna prenda.

Al final de la jornada, puede ponerse en contacto con la religiosidad local y participar en la ceremonia del pago a la tierra.

MÁS ACTIVIDADES

Pero hay más. También puede recorrer las estancias ubicadas a unos 10km de la población, donde se participa de la esquila de las alpacas.

Los más osados pueden arreglar paseos en balsa por el río Colca. La dificultad es media, y el precio de S/. 40 para un grupo de 5 personas. Para disfrutar al máximo del paisaje, se pueden alquilar bicicletas de montaña (S/. 7) para pasear por los alrededores. En la oficina de información turística puede rentar una movilidad que lo lleve a tres estancias, a 4,300 metros de altitud, y de allí bajar en bicicleta hasta Sibayo. Pasará por el mirador de Q’ello Q’ello, desde donde se pueden observar los volcanes Sabancaya, Ampato y Misti.

GUÍA DEL VIAJERO

Vía aérea: A Arequipa llegan las aerolíneas , y . Los pasajes pueden costar desde US$ 48. 

Vía terrestre: , ,, Tepsa y Flores llegan a la Ciudad Blanca. El trayecto toma entre 13 y 16 horas y puede costar entre S/.60 y S/.150. 

Hospedaje: En el pueblo hay 12 casas vivenciales y un total de 40 camas donde quedarse. Pernoctar cuesta S/.25 y quedarse por dos días y una noche, con todas las comidas, cuesta S/. 80.

Información: En la plaza de armas de encontrará una oficina turística donde puede descansar, separar su hospedaje, obtener información y contratar el paquete turístico de su conveniencia. asetur_rumillacta@hotmail.com

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