Ocho cosas que hay que agradecerle a las abuelas

Por Ximena Arrieta

Son pocas las personas que han estado en mi vida desde que tengo uso de razón, algunas llegaron y otras se fueron, pero una siempre ha estado presente: mi abuela.

El tiempo pasa y tanto ella como yo vamos creciendo (o envejeciendo). Tenemos estilos de vida diferentes, los cuales afrontamos a velocidades e intensidades distintas. Pero aunque los días pasen veloces, sé que mi abuela siempre estará esperándome como cuando de niña llegaba corriendo a sus brazos.

Con los años se aprende a siempre agradecer, y a ella hay tengo muchas razones para hacerlo. Creo no ser la única quien siente una profunda admiración y respeto por su abuela. Y tú, ¿te sientes identificada?¿Qué tienes que agradecerle tú a la tuya?