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Identifica posibles agresiones y aprende a hacerles frente - 1

Por: Karina Villalba

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 35% de las mujeres del mundo han sido víctimas de algún tipo de violencia (verbal, física, psicológica o sexual). En nuestro país, el Ministerio de la Mujer maneja cifras similares. Las agresiones incluyen acciones visibles, como golpes, empujones, bofetadas, violaciones sexuales, entre otras, que causan daño físico y psicológico, o aquellas invisibles y silenciosas que también dejan secuelas a nivel emocional, como el acoso callejero, amenazas verbales, gritos, humillaciones o coacción de la libertad. Lee estas recomendaciones para prevenir y defendernos de las agresiones.

- Si tu pareja te presiona para tener sexo

La intimidad sexual se debe dar en una situación de consentimiento entre ambos miembros de la pareja. Expresa con tranquilidad tu opinión, deseos y sentimientos. Pídele a tu pareja que te escuche y te respete. Cualquier situación en que una de las partes pretenda obligar a la otra a mantener relaciones sexuales, configura el delito de violación y debe ser inmediatamente reportada a las autoridades pertinentes (Policía Nacional y Ministerio Público). Denuncia las agresiones y solicita medidas de protección inmediatas.

- Ante un empujón, un jalón de cabello u otra agresión física

Si nos encontramos en una situación de inminente agresión física, no es conveniente responder el ataque porque podría exacerbar los ánimos del agresor. Lo mejor es intentar repeler o bloquear los golpes hasta lograr “zafarnos” de la lucha. Luego, debemos dirigirnos hacia un lugar donde nos encontremos seguras (la casa de algún familiar o de alguna amistad, las comisarías de mujeres o centros de emergencia de la mujer del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables).

La mejor manera de prevenir las agresiones es conociendo tus derechos y exigiendo respeto. (Foto: Shutterstock)

(Foto: Shutterstock)

- Si te insultan o te agreden verbalmente

Las agresiones verbales bajo ningún concepto deben ser admitidas por ninguna persona, varón o mujer. Repórtalas en la comisaría más cercana para que se sancione a los agresores.

- Cuando existe acoso laboral, si tu jefe o compañeros de trabajo te gritan o humillan

En este caso, corresponde poner en conocimiento al área de recursos humanos de la empresa o de la institución en la que se labora para que se inicie el procedimiento administrativo sancionador al que hubiere lugar.

- Si te manosean, hacen tocamientos indebidos, roces corporales o frotamientos en el bus

Se ha implementado la ley de acoso en espacios públicos, entre estos se considera a los medios de transporte, por lo que puedes denunciar el hecho en la comisaría más cercana.

- Si te insultan, amenazan o dicen obsenidades en la calle

Responde al agresor, pues de esta forma se desestabiliza un poco el poder que cree tener. Además, se llama la atención de otra gente y la humillación para él es mayor. A veces, la vergüenza es lo único que desestabiliza a un machista.

- Si te prohíben vestirte como quieres

Debes estar atenta, ya que si este comportamiento es frecuente y agrede tu libertad de decidir o actuar, estás frente a una modalidad de maltrato (violencia psicológica) y debes denunciar los hechos.

- Si te prohíben conversar con tu familia o amigos

Recuerda tus derechos: eres libre de mantener comunicación con tus seres queridos. Si te limitan el contacto con las redes afectivas que podrían protegerte y brindarte apoyo frente a futuros hechos de violencia, estás en peligro de quedar indefensa.

- Disponen o limitan tus ingresos económicos

¡Alerta! Estar frente a una relación en la que una de las partes quiere ejercer su poder sobre ti puede conducir a otras formas de violencia. Denuncia y solicitar medidas de protección inmediatas.

(Foto: Shutterstock)

¿Cómo superarlo?

-La mejor manera de prevenir este tipo de agresiones es conociendo los derechos que tenemos y exigiendo y brindando respeto a nuestras parejas.

- No te quedes callada. Atrévete a actuar y a denunciar los hechos de violencia familiar o sexual.

- Acude a la DEMUNA de la municipalidad de tu distrito.

-  Visita a un profesional que te asesore y te permita superar las situaciones de  dependencia, que te pusieron en una relación dañina en primera instancia.

- Destierra estereotipos y prejuicios, pues una mujer permanece en una relación violenta si cree que nada ni nadie la puede ayudar.

- Ten claro que nada justifica un hecho de violencia. Ésta es exclusiva responsabilidad de la persona agresora. Tú no tienes la culpa.

- No pretendas cambiar el comportamiento de la persona agresora. Las disculpas o promesas son parte del ciclo de la violencia.

- Busca ayuda en alguna institución para acceder a la justicia, protección y recuperación, como en un Centro Emergencia Mujer.

 

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