Natalia Parodi: "Ella es mayor que él"

Parejas a mi alrededor: él es nueve años mayor que ella. Ella es cuatro años mayor que él. Él y ella tienen la misma edad. Ella es siete años mayor que él. Él es ocho años mayor que ella. Ella es dos años mayor que él. Él es tres años mayor que ella. Y la lista sigue. Varias parejas donde ella es mayor que él y donde la edad no es otra cosa que un detalle en el documento de identidad.

Por supuesto que las personas de mi entorno no son una muestra representativa de una tendencia. Pero me han permitido observar cuándo funciona una relación donde ella ha celebrado más cumpleaños que él.

La combinación de mujer mayor con hombre menor, en su mejor versión, puede resultar en una pareja realmente feliz. Ella ha aprendido más sobre las relaciones y sobre sí misma. Tiene la serenidad de quien ha superado una etapa donde las emociones se desbordan, y puede procurar la calma que algunos hombres necesitan para lidiar con temas difíciles. El hombre menor, por otro lado, viene con un montón de energía lista para desplegar. Tiene las pilas recién cargadas. Y casi siempre carga una mochila de vida más ligera, lo cual se traduce en ilusión y curiosidad, e inspira alegría.

Existe el temor de que un hombre joven seduzca a una mujer mayor que se siente sola para que ella lo mantenga. O también la sospecha de que él se fije en mujeres jóvenes. ¿Pero qué tiene que ver la integridad con la edad? ¿Y acaso algunos hombres mayores no se involucran con chicas jóvenes? La deslealtad no tiene que ver con la edad.

Cuando un hombre joven pone el ojo en una mujer mayor que él, es porque hay algo especial en ella que lo enamora. Quizá sea la experiencia lo que la haga más atractiva. Ellos dicen que encuentran atractivo ese aplomo que sus mujeres han adquirido con el paso del tiempo. Uno un día me dijo «Vi fotos de ella cuando era menor. Me gusta más ahora. Su mirada es más profunda».

Hay hombres valiosos de todas las edades. Y un hombre joven que decide tener una relación con una mujer mayor que él, tiene agallas. Sabe que ella ha vivido cosas que posiblemente él aún no.

Y la mujer que se enamora de un hombre menor sabe que él aún tiene un camino por recorrer y conquistar. Es decir, el reto de la relación es tener la mente abierta y la capacidad de respetar que cada uno vive momentos diferentes.

Funciona cuando se permiten ser, y acompañan con amor el recorrido de su pareja, cuidando de encontrarse a mitad de camino y dar espacio también a construir algo juntos. Si se han encontrado en momentos distintos de la vida, es cuestión de ajustar cada uno su velocidad.

Y si se han enamorado, quizá sigan juntos por el resto del viaje.

En cuanto a proyectos de vida, como tener hijos o comprar una casa, ella tendrá que esperar un poco a que él esté listo, y él tendrá que apurarse un poco, para llegar a ese punto medio donde se puedan encontrar. Pero con amor y voluntad todo se puede.

Es verdad que hay retos de la vida cotidiana. Por ejemplo, es probable que él quiera salir a fiestas o discotecas hasta tarde, mientras que ella prefiera salir a comer o quedarse en casa viendo una película. O que le incomode ir a un lugar donde el volumen de la música no le permita conversar y que a él eso le encante.

Pero esto lo viven también parejas de la misma edad. No siempre queremos las mismas cosas al mismo tiempo que nuestra pareja. Y siempre, sí, será importante ceder. A veces él y a veces ella.

Combinar historias para una vida compartida requiere amor y artesanía.

En cuanto al riesgo de que no funcione, solo lo puede intuir quien lo vive. Pero si tu entraña te dice que él es la persona con quien eres feliz, y solo te detiene su edad, ¿lo dejarías pasar? Yo no.

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