La piometra puede matar a tu mascota

La piometra es un término del que, probablemente, nunca escuchamos hablar, pero que está relacionado con una condición potencialmente mortal para nuestras mascotas.

Normalmente, quienes tienen perras y gatas en casa, escuchan por primera vez hablar de la piometra cuando se presentan algunos síntomas en ellas o cuando se habla de la importancia de esterilizarlas y se enumeran los riesgos que implica no hacerlo.

En simple, la piometra es una infección producida por bacterias dentro de la matriz del animal.

De acuerdo con el médico veterinario Marco Díaz de la clínica FisioVet, ésta se presenta como un contenido purulento en el útero y en el cuello uterino. Éste se llena de pus y genera una seria infección que puede ser abierta -se drena el contenido por la vulva- o cerrada, que se queda adentro y resulta ser la más peligrosa.

“La piometra, o tumores mamarios, puede presentarse a cualquier edad y en cualquier momento, depende mucho del desorden hormonal que tenga la mascota”, explica Díaz, aunque señala que las mascotas adultas están más propensas a tenerla

Una de las causas principales es cuando el animal está expuesto repetidamente a estrógeno y progesterona, por lo cual una medida de prevención es evitar los medicamentos para el control de celos.

“Básicamente las perras que hacen falsas preñeces, que se les hinchan las mamas y que muestran un comportamiento como si estuvieran preñadas, son las más propensas a tener este problema”, agrega Díaz.

Si el propietario de la mascota no quiere que ésta tenga crías, el especialista recomienda que lo mejor es esterilizarla de inmediato, siempre y cuando tenga 6 meses de edad o más. Aquellas perras que nunca han parido, tienen un riesgo más alto de ser afectadas por esta condición.

“Así se evita la posibilidad de que se presente este problema, y lo mismo con los machos, al castrarlos se evitan posibles tumores prostáticos. Con esto, además, se contribuye con la tenencia responsable y se reduce la sobrepoblación de estos animales”, agregó.

¿A qué señales debemos de estar atentos?

Los principales síntomas de las piometra son:

-Ánimo decaído.

-Cérvix cerrada.

-Letargo

-Secreciones vaginales purulentas o hemorrágicas

-Pueden beber más agua de lo habitual

-Pueden orinar más de lo habitual

-Pueden tener el abdomen distendido.

-Falta de apetito

-Los síntomas aparecen de 3 a 8 semanas después del celo.

-Estado de ‘shock’ si es que la infección ha avanzando al punto de generar una septicemia (bacterias en la sangre). 

* Si estás interesado en conocer el nuevo servicio de asistencia veterinaria que ofrece cobertura para perros y gatos en caso de emergencias y accidentes, ingresa a Club WUF Mascotas