Campo de Marte: ¿Qué grandes sucesos ocurrieron en el gran parque limeño a lo largo de su historia?

Este gigantesco parque de 65 mil metros cuadrados está atravesado por la avenida de la Peruanidad, en donde se han realizado muchas veces las paradas militares por Fiestas Patrias, así como multitudinarios desfiles escolares.

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En donde hoy se ubica el Campo de Marte, antes estuvo el viejo Hipódromo de Santa Beatriz, que existió entre 1903 y 1938. En ese mismo terreno, en 1911, los habitantes de Lima observaron asombrados el primer gran vuelo sobre la capital del aviador peruano Juan Bielovucic, quien descendió a bordo de su aeroplano Voisin en una improvisada pista de aterrizaje.

En ese mismo hipódromo, en el año 1933 el militante aprista Alejandro Mendoza Leiva atentó contra el presidente Luis Sánchez Cerro, quien había asistido a un desfile de reservistas que estaban por partir hacia la frontera con Colombia.

El 26 de julio de 1942, mientras la aviación inglesa bombardeaba el puerto alemán de Hamburgo, durante la Segunda Guerra Mundial, en Lima los gallardos escolares peruanos realizaban el tradicional desfile por Fiestas Patrias, en el Campo de Marte.

Algo parecido sucedió el 27 de julio de 1961, cuando 35 mil alumnos pertenecientes a 37 centros educativos nacionales y particulares, marcharon en el Campo de Marte por las fiestas de la Independencia. El primer batallón en cruzar frente a la Tribuna oficial, en donde se encontraba el presidente Manuel Prado Ugarteche, fue el perteneciente al colegio militar “Elías Aguirre”.

La ausencia de edificios y los habituales vientos de agosto, convocaban todos los inviernos a cientos de niños que con sus cometas –pavas, aviones y barriletes- se trenzaban en emocionantes competencias tratando que su artefacto fuera el que volara más alto, o se retaban a combates aéreos inacabables.

Piscina olímpica

Con el nombre de “Ciudad de Lima”, fue inaugurada la piscina del Campo de Marte el 12 de febrero de 1962. La flamante pileta olímpica, de 50 metros de largo y 20 de ancho, fue utilizada en su debut por el equipo peruano que estaba por viajar al sudamericano de Buenos Aires y por algunas viejas glorias de la natación peruana. Las tribunas fueron construidas para albergar hasta 7 mil espectadores.

En 1981, luego de doce años de interrupción por la dictadura militar, el Campo de Marte volvió a engalanarse con la presencia de los colegios, sus batallones y sus bandas de música, en un ambiente de gran patriotismo, conmemorando el 160 aniversario de la independencia nacional.

Ese 26 de julio el público se deleitó con el paso de 37 bandas escolares, precedidos por un bosque de banderas, que portaron escolares de las seis zonas educativas de Lima, en un ambiente de algarabía.

Salsa para todos

El Domingo de Ramos del 19 de marzo de 1989, la orquesta colombiana de salsa “Niche” convocó, según los estimados más conservadores, a 250 mil almas en los predios del gran parque de Jesús María.

La banda salsera de Jairo Varela y Tito Gómez reunió, según otros, hasta un millón de personas en un concierto gratuito que empezó en horas de la tarde y se cerró con la oscuridad de la noche. Evento así no ha vuelto a repetirse, aseguran los entendidos.

En setiembre de 2012 las alamedas y parques del Campo de Marte fueron capturadas por los aromas más irresistibles de la variada y multicolor comida peruana, preparada por los cocineros más reconocidos de la costa, sierra y selva del Perú.

En Mistura un total de 500 mil visitantes saborearon junto con sus familias y amigos las deliciosas porciones de los platos más emblemáticos de nuestra gastronomía. En esa edición el protagonista fue el chancho al palo, que satisfizo los paladares más exigentes en el evento que duró un total de 11 días.

Desde junio de 2021 las aglomeraciones de personas que empezamos a observar ya no eran para disfrutar de la deliciosa comida peruana. La devastadora pandemia que llegó al Perú en 2020 obligó a convertir este amplio recinto en un gran vacunatorio.

El Campo de Marte, que alguna vez tuvo una laguna, es de propiedad de la comuna metropolitana, aunque está gestionado por la Municipalidad de Jesús María. Acaba de ser reabierto y se puede observar que familias y grupos de amigos empiezan a disfrutar de su aire puro y su estimulante amplitud. Señal, esperemos, que los tiempos difíciles han empezado ha pasar.

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