El reconocido futbolista compartió detalles de su carrera en una entrevista con El Comercio, publicada en 1952, un año antes de su retiro de las canchas.
“Desde el año de 1929, en que en una cancha de huacho, el cañonero cañetano vistió por primera vez la gloriosa casaquilla crema, son incontables los partidos que ha jugado y los goles que ha marcado”, dice la nota publicada el 13 de setiembre de 1952.
El “cañonero merengue” recibió a El Comercio en su casa de la avenida Bolognesi, junto a su esposa y sus dos hijos. Lo rodeaban fotografías, trofeos y gallardetes ganados en lides memorables.
Las casaquillas que vistió
“Conservo en cuadernos, que cuido mucho, los principales episodios de mí ya larga actuación futbolística. He participado en 14 giras al extranjero. De ese número, 6 veces con representativos nacionales, 5 con mi club, una con un combinado peruano-chileno, denominado Combinado del Pacífico, otra con Alianza Lima y una vez con el club chileno Colo Colo, para que lo reforzara en un partido ante el Atlético Independiente de Argentina”, contó el ídolo de la “U”.
Memorables títulos y campeonatos
Cuando se le preguntó si recordaba el número de certámenes internacionales en que había defendido los colores patrios respondió: “Naturalmente, he vestido la casaquilla patria en nueve torneos internacionales. La primera vez fue en el Campeonato Sudamericano Extraordinario jugado en Lima, en 1935. Jugué los tres partidos que sostuvo nuestro equipo contra Uruguay, Argentina y Chile. Después he participado defendiendo los colores nacionales en las Olimpiadas de Berlín, en el Sudamericano Nocturno de Buenos Aires y en los Juegos Bolivarianos realizados en 1938, en Bogotá”.
Luego agrega: “también en el Campeonato Sudamericano jugado en 1939, en nuestra capital, y en el cual nuestro cuadro se clasificó campeón invicto, luego de brillante campaña; en el torneo jugado en 1940 en Lima por la Copa Roque Sáenz Peña contra la selección argentina, con la cual nuestro representativo se midió tres veces seguidas; en el Campeonato Sudamericano jugado en 1941, en Santiago de Chile; en el Sudamericano de 1942 realizado en Montevideo y, por último, en el Sudamericano efectuado en 1947 en Guayaquil”.
Mis mejores goles
Aunque Lolo Fernández no recuerda el número de goles que ha marcado, el periodista le pregunta: ¿Puede decirnos, al menos, los que considera sus mejores goles?
“Tres son los goles que recuerdo con mayor satisfacción. En primer término el que señalé al arquero austríaco (Olimpiadas de Berlín). Fue de tiro libre a unos veintitantos metros de la valla. Me salió un taponazo formidable. Pero lo mejor de ello fue que Alejandro Villanueva me habló antes, indicándome que disparara a la dirección donde él se colocaría. Inteligentemente se colocó en él único claro que dejó la recia defensa europea, y en el momento de disparar se agachó, terminando el balón en las redes. Mi emoción fue tal que lloré junto con los otros diez muchachos y los varios cientos de peruanos que estaban en el estadio berlinés”, cuenta el histórico delantero.
“Después de ese gol, recuerdo mucho los que marqué a los guardavallas argentinos Rotman y Bello, que vinieron con los clubes Vélez Sarsfield y Atlético Independiente, en 1936 y 1941, respectivamente. Ambos de una distancia de más de 40 metros. Al primero con shot ejecutado a la carrera, y al segundo de un tiro libre”.
La selección peruana, según Lolo
¿Cómo formaría usted la selección nacional?
“La pregunta es difícil de responder. Pero ya que ustedes me lo piden se la daré. Como arqueros, considero como los mejores a Rafael Asca y Teódulo Legario. Como backs, Guillermo Delgado, Adolfo Donayre, César Brush y Mario Lobatón”.
“Para la línea media me gustan Lorenzo Pacheco, Ren Rosasco, Dagoberto Lavalle, Cornelio Heredia, Villamares y Luis Calderón. En la línea delantera, como wings izquierdos, mi hermano Lolín, que estoy seguro causará buena impresión en su reaparición, y Ernesto Morales; de derechos Gilberto Torres y mi compadre Jacinto Villalba, si es que vuelve”.
“De interiores derechos me gustan Tito Drago y Roberto Castillo y de izquierda Alberto Terry y Vides Mosquera. Por último, como delanteros considero a Manuel Rivera y Vicente Villanueva como los mejores.
El cronista del decano le pregunta sobre su actual situación y su futuro. El crack cañetano dice: “La actual directiva de la ‘U’, que preside el señor Octavio Cillóniz Oberti, mi ex compañero de cuadro, se ha portado muy bien conmigo, pues además del sueldo vitalicio que me ha asignado, me concede otra cantidad mensual, fuera de los premios que tenemos los jugadores por partidos ganados y goles marcados”.
Luego revela: “En lo que respecta a mi vida particular, mi situación también ha mejorado bastante, debido a la generosidad del presidente de la República, Manuel Odría, para quien mi agradecimiento, así como el de todos los míos, es imperecedero. El Jefe de Estado dispuso mi cambio de colocación de la Municipalidad a la Superintendencia de Aduanas del Callao, donde percibo un haber mensual superior y gozo de facilidades para mis entrenamientos”.
El gran Lolo concluye: “En lo que se refiere al terreno que me fue concedido, ya gané el juicio y el dinero lo tengo depositado en un banco local. Pronto podré adquirir un terreno en un lugar saludable y después construir una casita para vivir en ella con mi esposa y mis hijitos, que es lo que más quiero en la vida”.
“Lolo Fernández, además de ser uno de nuestros más extraordinarios futbolistas, es un deportista modelo; de una fuerza de voluntad asombrosa, metódico con todos sus actos; sencillo y correcto. Por eso se ha ganado en forma unánime la admiración y el cariño entrañable de todos los peruanos. A ello se debe que sea querido por todos, por blancos y negros, viejos y niños. Y es que los peruanos no olvidamos nunca a quienes, como este deportista ejemplar, conquistaron triunfos y renombre para la patria”. Así finaliza la entrevista publicada en El Comercio.