El Día Internacional de la Alfabetización, fecha que ha venido ganando importancia desde que la ONU aprobara su conmemoración. El objetivo de este día, es evaluar cómo ha mejorado la tasa de alfabetización de los países miembros, en pos al logró de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible. Aunque en un principio en este día solo se evaluaba la cantidad de personas que sabían leer y escribir, dentro del territorio nacional de cada país. A partir del año 2017, también se sumó la alfabetización digital, la capacidad que tienen las personas para entender y usar de forma provechosa las nuevas tecnologías.
La alfabetización es un derecho humano fundamental y, a la vez, el cimiento del aprendizaje a lo largo de toda la vida, la base para mejorar el bienestar y los medios de subsistencia. Requiere de medidas y esfuerzos permanentes, focalizados y sólidos desarrollados en forma constante.
El concepto de alfabetización ha evolucionado con el paso de los años. La idea tradicional que lo limitaba al aprendizaje de la lectura, la escritura y las nociones básicas de cálculo todavía se utiliza ampliamente, así como el concepto de alfabetización funcional, que lo vincula con el desarrollo social y económico. Pero han surgido otras características de alfabetización con el fin de iniciar las distintas necesidades de aprendizaje de las personas en las sociedades del conocimiento, aplicadas en el proceso de globalización.
Las tecnologías digitales están cambiando a un ritmo cada vez más creciente el modo en que las personas viven, trabajan, se instruyen y sociabilizan en todas partes del mundo. Dichas tecnologías ofrecen nuevas posibilidades a las personas para que mejoren en todos los aspectos de su vida, incluido en el acceso a la información; a la gestión de los conocimientos; a las redes, los servicios sociales, la producción industrial y las diversas modalidades de trabajo. No obstante, quienes carecen de acceso a las tecnologías digitales, a los conocimientos y a las habilidades y competencias necesarias para navegar por conducto de las redes pueden quedar marginados en el seno de sociedades cada vez más digitalizadas. La alfabetización es, en este sentido, una de estas competencias esenciales.
El Día Internacional de la Alfabetización 2020 debe expresar con énfasis acerca de la “Enseñanza de la alfabetización y el aprendizaje durante y después de la pandemia por la COVID-19 “, y especialmente en el papel de los docentes y la evolución de la enseñanza en la lectoescritura dirigidas tanto a los jóvenes como a los adultos.
La crisis reciente del COVID-19 constituye un crudo recordatorio de la gran diferencia entre el discurso político y la realidad: ya antes de la pandemia existía una gran brecha y esta se ha incrementado, con la consecuente repercusión en la vida diaria y el aprendizaje de los jóvenes y adultos que no carecen o disponen de pocas competencias en lectoescritura.
Las nuevas generaciones deben comprender la importancia que tienen las campañas de alfabetización, de manera que se pueda promover el acceso universal a la educación básica y, más importante aún, “erradicar el analfabetismo en el país a fin de lograr los objetivos nacionales de la Educación para Todos.